El acuerdo entre DJI y Skycatch contempla la preparación y venta de 1.000 drones a la compañía japonesa Komatsu, especializada en minería y construcción. Se tratará de RPAS de tipo industrial y especialmente destinados a la construcción. Por su magnitud, es el mayor pedido de drones comerciales hasta la fecha.
El acuerdo es importante también porque representa la primera ocasión en que DJI fabricará de forma personalizada un dron (basado en su Matrice 100) para un cliente específico. También Skycatch pondrá en ellos un software específico, modificado para adaptarlo a las necesidades de Komatsu. El resultado será el Skycatch Explore 1, que se dedicará a volar sobre las obras de edificios para crear mapas en 3D precisos.
Komatsu, el cliente, usará estos mapas para hacer perforaciones con más precisión, remover la tierra y equilibrarla de forma más exacta, de manera que se ahorren tiempo y recursos. Estos drones permitirán hacer un mapeo rápido del sitio, mucho más de lo que permitían otros RPA hasta la fecha, según Komatsu. Así, el lugar de construcción se puede visualizar y comprobar en el modelo 3D, para tomar decisiones sobre la marcha.
DJI, que planea salir a Bolsa en 2019 como se ha conocido recientemente y publicamos en ToDrone, se consolida así como un proveedor de drones para usos industriales. Y, lo que es más importante, adquiere relevancia su papel como compañía especializada en el segmento profesional, no solo en el de aeronaves no tripuladas de recreo, que es como mucha gente aún ve a la empresa china. Sin embargo, esta cuenta con un ambicioso plan para engullir un buen bocado del mercado empresarial B2B (business to business).
La otra pata del acuerdo es Skycatch, especializada en software y análisis de datos procedentes de las imágenes que obtienen los drones. Ambas compañías ya colaboraban, pero la entrega de 1.000 drones especializados en construcción supone un paso más allá en su relación.
La compañía japonesa Komatsu se embarcó en el mundo de la ‘construcción inteligente’ en 2015, con vistas a introducir nuevos métodos de hacer las cosas en el sector. La utilización de una flota de drones capaces de recoger datos, mapear el terreno y las obras, para después obtener valor añadido en su análisis entra dentro de su estrategia.
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El acuerdo es importante también porque representa la primera ocasión en que DJI fabricará de forma personalizada un dron (basado en su Matrice 100) para un cliente específico. También Skycatch pondrá en ellos un software específico, modificado para adaptarlo a las necesidades de Komatsu. El resultado será el Skycatch Explore 1, que se dedicará a volar sobre las obras de edificios para crear mapas en 3D precisos.
Komatsu, el cliente, usará estos mapas para hacer perforaciones con más precisión, remover la tierra y equilibrarla de forma más exacta, de manera que se ahorren tiempo y recursos. Estos drones permitirán hacer un mapeo rápido del sitio, mucho más de lo que permitían otros RPA hasta la fecha, según Komatsu. Así, el lugar de construcción se puede visualizar y comprobar en el modelo 3D, para tomar decisiones sobre la marcha.
DJI, que planea salir a Bolsa en 2019 como se ha conocido recientemente y publicamos en ToDrone, se consolida así como un proveedor de drones para usos industriales. Y, lo que es más importante, adquiere relevancia su papel como compañía especializada en el segmento profesional, no solo en el de aeronaves no tripuladas de recreo, que es como mucha gente aún ve a la empresa china. Sin embargo, esta cuenta con un ambicioso plan para engullir un buen bocado del mercado empresarial B2B (business to business).
La otra pata del acuerdo es Skycatch, especializada en software y análisis de datos procedentes de las imágenes que obtienen los drones. Ambas compañías ya colaboraban, pero la entrega de 1.000 drones especializados en construcción supone un paso más allá en su relación.
La compañía japonesa Komatsu se embarcó en el mundo de la ‘construcción inteligente’ en 2015, con vistas a introducir nuevos métodos de hacer las cosas en el sector. La utilización de una flota de drones capaces de recoger datos, mapear el terreno y las obras, para después obtener valor añadido en su análisis entra dentro de su estrategia.
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