Aníbal Ollero es catedrático de Robótica de la Universidad de Sevilla y, desde ahora, contará con una beca del Consejo Europeo de Investigación (ERC, por sus siglas en inglés) de 2,5 millones de euros para investigar sobre nuevos diseños de drones.
La dotación económica se encuadra dentro del programa Advanced Grants, el nombre de la beca, y se orienta a proporcionar recursos a los investigadores, para que ejecuten sus ideas y al mismo tiempo generen trabajo entre los estudiantes de doctorado. En definitiva se trata de dinamizar el entorno científico y de investigación en los centros académicos.
El proyecto de investigación de Aníbal Ollero trata de crear un sistema compatible de manipulación robótica que integre alas fijas y batientes, con el fin de aumentar la seguridad y el alcance de los drones. La dotación económica de 2,5 millones de euros se ofrecerá a lo largo de cinco años.
Ollero es uno de los 18 investigadores españoles que ha seleccionado el Consejo Europeo de Investigación para esta beca. En total, serán 269 investigadores en Europa quienes se beneficiarán de un presupuesto de 653 millones de euros.
El perfil de Ollero es el de un especialista en la investigación robótica y, especialmente, en el ámbito de los drones. Coordina el proyecto europeo Aeroarms, que se dedica a profundizar en el uso de drones para inspecciones industriales y que está dotado con 5,7 millones de euros. En él participan centros de investigación de cinco países europeos.
El catedrático de la Universidad de Sevilla también dirige el Grupo de Robótica, Visión y Control, que cuenta con el esfuerzo de más de 70 investigadores. Es un ejemplo de cómo los centros académicos pueden ensanchar los límites de la tecnología de los RPAS. El centro del CSIC es otro buen ejemplo de ello. Un trabajo realizado por investigadores de esta institución logra producir ahorros del 80% en el herbicida, al detectar las malas hierbas en la fase temprana de crecimiento.
Imagen: Universidad de Sevilla
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La dotación económica se encuadra dentro del programa Advanced Grants, el nombre de la beca, y se orienta a proporcionar recursos a los investigadores, para que ejecuten sus ideas y al mismo tiempo generen trabajo entre los estudiantes de doctorado. En definitiva se trata de dinamizar el entorno científico y de investigación en los centros académicos.
El proyecto de investigación de Aníbal Ollero trata de crear un sistema compatible de manipulación robótica que integre alas fijas y batientes, con el fin de aumentar la seguridad y el alcance de los drones. La dotación económica de 2,5 millones de euros se ofrecerá a lo largo de cinco años.
Ollero es uno de los 18 investigadores españoles que ha seleccionado el Consejo Europeo de Investigación para esta beca. En total, serán 269 investigadores en Europa quienes se beneficiarán de un presupuesto de 653 millones de euros.
El perfil de Ollero es el de un especialista en la investigación robótica y, especialmente, en el ámbito de los drones. Coordina el proyecto europeo Aeroarms, que se dedica a profundizar en el uso de drones para inspecciones industriales y que está dotado con 5,7 millones de euros. En él participan centros de investigación de cinco países europeos.
El catedrático de la Universidad de Sevilla también dirige el Grupo de Robótica, Visión y Control, que cuenta con el esfuerzo de más de 70 investigadores. Es un ejemplo de cómo los centros académicos pueden ensanchar los límites de la tecnología de los RPAS. El centro del CSIC es otro buen ejemplo de ello. Un trabajo realizado por investigadores de esta institución logra producir ahorros del 80% en el herbicida, al detectar las malas hierbas en la fase temprana de crecimiento.
Imagen: Universidad de Sevilla
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