El equipo Pegaso estará destinado a controlar posibles infracciones que se lleven a cabo con el uso de drones, ya sea durante vuelos recreativos o por parte de usuarios profesionales. Se trata de una unidad que acaba de crear la Guardia Civil en Madrid.
Esta nueva patrulla se ha planteado como respuesta a la popularización de las aeronaves no tripuladas, que según las autoridades ha llevado a la proliferación de vuelos no autorizados. Estas situaciones preocupan especialmente cuando los drones vuelan cerca de aeródromos y es precisamente aquí donde ha empezado a actuar el equipo.
Es la Guardia Civil del aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas la que ha puesto en marcha esta unidad. La iniciativa, por tanto, parte del aeropuerto de Madrid, pero la actividad de la patrulla también se extiende a otros aeródromos de la capital, como el de Cuatro Vientos o el de Getafe.
El nuevo equipo ya ha detectado ciertas infracciones. Por ahora estas tienen que ver con la falta de documentación, el no disponer de placas identificativas en las aeronaves o pilotar a distancias inferiores a las permitidas en los aeródromos.
No hay duda de que el número de drones en España ha crecido sustancialmente en los últimos dos años. En el ámbito profesional basta con acudir a los datos de AESA: hay más de 3.400 operadores registrados y más de 4.200 aeronaves no tripuladas. En el plano recreativo no hay cifras rotundas, pero la proliferación de una oferta cada vez más asequible por parte de fabricantes como DJI o Parrot ha contribuido al aumento de estos aparatos.
En cambio, en lo que respecta a AESA, los operadores siguen quejándose de la falta de emisión de autorizaciones por parte del organismo regulador para el vuelo en zonas de espacio aéreo controlado, en condiciones nocturnas o sobre aglomeraciones de personas.
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Esta nueva patrulla se ha planteado como respuesta a la popularización de las aeronaves no tripuladas, que según las autoridades ha llevado a la proliferación de vuelos no autorizados. Estas situaciones preocupan especialmente cuando los drones vuelan cerca de aeródromos y es precisamente aquí donde ha empezado a actuar el equipo.
Es la Guardia Civil del aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas la que ha puesto en marcha esta unidad. La iniciativa, por tanto, parte del aeropuerto de Madrid, pero la actividad de la patrulla también se extiende a otros aeródromos de la capital, como el de Cuatro Vientos o el de Getafe.
El nuevo equipo ya ha detectado ciertas infracciones. Por ahora estas tienen que ver con la falta de documentación, el no disponer de placas identificativas en las aeronaves o pilotar a distancias inferiores a las permitidas en los aeródromos.
No hay duda de que el número de drones en España ha crecido sustancialmente en los últimos dos años. En el ámbito profesional basta con acudir a los datos de AESA: hay más de 3.400 operadores registrados y más de 4.200 aeronaves no tripuladas. En el plano recreativo no hay cifras rotundas, pero la proliferación de una oferta cada vez más asequible por parte de fabricantes como DJI o Parrot ha contribuido al aumento de estos aparatos.
En cambio, en lo que respecta a AESA, los operadores siguen quejándose de la falta de emisión de autorizaciones por parte del organismo regulador para el vuelo en zonas de espacio aéreo controlado, en condiciones nocturnas o sobre aglomeraciones de personas.
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