El body painting siempre nos ha asombrado, porque combina el cuerpo humano con esos efectos ópticos tan alucinantes. Por eso, a pesar de saber que todo es irreal, no podemos dejar de observar esas fotografías. A continuación te mostramos algunos de los trabajos más asombrosos de body painting.
Ese hermoso pájaro
Este es uno de los más difíciles de distinguir, porque a primera vista, si no te decimos que es un trabajo de body painting, es posible que no te des cuenta de que lo que hay en realidad en esa fotografía es un cuerpo dibujado.
Si te fijas bien, sí que se ve en los pliegues de la parte azul, que se ve perfectamente que es un cuero de mujer. Si quieres más pistas, puedes ver, al final del pico, el codo de la persona. Lo mejor de estos efectos es que, combinados con un fondo negro, es posible no distinguir apenas nada. Es impresionante.
Ver el amanecer en tu espalda
Podría ser el verso de un poema o de una canción, pero en este caso, llega a ser de lo más literal. Y lo más bonito que hayamos visto en mucho tiempo. El arte tiene muchas formas de expresión, y el body painting es una de ellas. ¿Cómo es posible dotar de esa luminosidad al cuerpo humano?
Algún truco que no sabemos sí que debe de haber, pero de momento, nos quedamos únicamente con esa visión tan espectacular que nos transporta, desde su cuerpo, hasta unas montañas.
Las manos sinuosas
Hasta el trabajo más simple de body painting puede llegar a ser de lo más espectacular. Aquí solo hay unas manos, y las distinguimos perfectamente, pero el body painting no es bueno únicamente cuando no se distingue el cuerpo humano, sino también en el realismo de lo falso.
Es decir, vemos unas manos, pero eso no quiere decir que porque sepamos que son manos, el trabajo es peor. ¿Acaso un cuadro de un paisaje es un mal trabajo solo porque sepamos que es un cuadro? No, el lienzo no es tan importante, aunque aquí es algo que impresiona. El lagarto está bien hecho, y el ojo sobre todo, son impresionantes.
Y atentos bajo la mirada del tigre
Puede que este sea el trabajo de body painting más conocido, o uno de los más conocidos. Y se trata únicamente de aprovechar las formas del cuerpo humano para ver que en la naturaleza, también existen esas formas. Lo que es el hocico del tigre, y la parte del centro, es una mujer agachada.
La composición es bastante buena, y aunque ya conocíamos esta obra, no nos deja nunca de impresionar.
El que se esconde cual camaleón
Otro trabajo magnífico con fondo negro. Nos asombra, sobre todo, porque no solo el trabajo del body painting es bueno, sino también el de la fotografía posterior, para que resalte, sobre todo la luminosidad, y no el cuerpo de la persona.
Así, podemos ver a la derecha del todo, la cara de la persona, pintada de negro. Vemos cómo el pliegue de la pata del camaleón también es el de la persona. Es un trabajo maravilloso. ¿Cuántas personas en el mundo pueden llegar a crear algo así?
La piel seca y baldía
Existen diferentes trabajos de body painting, y no todo se reduce a esconder el cuerpo, sino también de integrarlo en otro medio. Aquí por ejemplo, nos damos cuenta de que hay una persona, sí, pero imita muy bien la textura que hay de fondo, de unos troncos apilados.
En realidad, ver a la persona, también nos impresiona, de ahí que pensemos en la integración entre el medio y el hombre.
El cuerpo como arte
Como ya hemos dicho, vemos que hay diferentes estilos de body painting: mientras unos se lo toman con humor, otros creen que es un lienzo más. Un lienzo que de por sí ya es bello. Y para muestra, este trabajo.
En realidad no tiene una forma en concreto, o nosotros no hemos averiguado qué es, pero aún así, vemos dos cuerpos pintados de una forma exquisita, como si de un patrón de una alfombra se tratara. Es un trabajo minucioso y que requiere mucha dedicación, no solo por parte del artista, sino de los lienzos.
Te escondes tras la pared
Esto es otar muestra de cómo el cuerpo puede integrarse en el medio. Efectivamente, vemos a la modelo, pero es como si estuviera incrustada en la pared. Los diseños del cuerpo se esconden tan bien, que en algunas ocasiones no sabemos dónde empieza el cuerpo y dónde termina el papel pintado.
Aquí, además de body painting, también se trata de ubicarse en un espacio en concreto, para que el ángulo de visión sea el correcto también.
El flamenco
Lo que más sorprende del body painting es que podemos averiguar cuál es la referencia de lo que se está representando, independientemente del cuerpo de la persona. Así, aquí vemos a una persona, que se ha transformado en un flamenco.
Pero el trabajo físico, y el artístico se unen, para dar al que ve, una visión irreal y real del flamenco. De lo majestuoso que es, y de lo asombroso que el cuerpo humano puede llegar a ser.
Kate Upton a la moda
Los trabajos de body painting también sirven para tomárselo con humor algunas veces. Así que si por ejemplo, buscas en Internet, “Kate Upton desnuda”, probablemente te encuentres con esto. ¿Está desnuda? Sí. ¿Completamente? Es posible.
Pero el efecto óptico del body painting nos impide contemplar la desnudez como tal.
Un coche con mucho cuerpo
Las obras de body painting grupales son las más asombrosas porque requieren bastante coordinación, por parte de los cuerpos, y del artista. Así, esto puede llegar a ser una obra maestra. Es un coche, sí, pero hecho a base de cuerpos pintados. Vemos, algunas partes claramente, pero la óptica hace mucho.
Así, aunque el trabajo artístico no parece estar a la altura de otros trabajos, el conjunto es impresionante.
Body painting reinvidicativo
A veces este tipo de arte también sirve para reivindicar algo en concreto. No sabemos el qué, pero en este caso vemos cómo el conjunto de cuerpos van formando la cara del presidente Obama. También es cosa de la perspectiva, que es bastante buena.
¿Y el tipo de detrás? no lo sabemos. Estamos abiertos a interpretaciones.
Y contar tus lunares como si fueran estrellas
Ya vimos el impresionante cuerpo de una mujer y una montaña. Pues imagina ver el universo entero en la espalda de estas mujeres. ¿Es la misma persona? ¿Son gemelas? No lo sabemos, pues se parecen mucho de perfil. Aún así, que eso no reste nuestra atención a la obra.
El resultado es magnífico y casi nos transporta hasta ese lugar.
Y sus manos echaron a volar
Es un trabajo de manos, y aunque sepamos que lo son, a veces nos cuesta ubicar los pulgares. Sí, vemos uno que es la cabeza del águila. ¿Y el otro? Da lo mismo, esto es lo mejor del body painting, mirar la pintura para descifrar en qué parte está cada cosa.
Aquí sí sabemos cuánto tiempo debemos mirar, no como en las obras de arte moderno, que nos quedamos delante pensando como tontos qué es lo que tenemos delante.
Su rostro era digno de ser retratado
El arte que imita el arte, esto es lo que vemos, al menos los que estamos familiarizados con el arte. Porque lo que tenemos aquí es un ejemplo del pop art de Lichtenstein, que imita el estilo del cómic. Pero, ¿dónde está la mujer de verdad? ¿Dónde empieza, y dónde terminan sus facciones?
Es un trabajo completo, que nos rememora otras obras, y ahí está el verdadero trabajo.
El cuerpo al natural
Ese azul hace que recordemos a la tremenda Mística de los X-Men, que también conlleva en la realidad un verdadero trabajo de body painting. Pero no nos desviemos del asunto. Lo magnífico de esta obra es la capacidad de crear luz.
Así, vemos cómo en la zona del vientre, en la parte central del árbol que se representa, hay una luz que viene de detrás, como si estuviera dentro de ella. Puede ser algo simbólico, o nosotros, que estamos divagando, pero nos encanta.
El otoño llegó al cuerpo
Estos trabajos donde se esconde una persona también nos asombra mucho. Dejamos de discernir lo que es real de lo que no. Entonces, también nos preguntamos si lo que rodea al cuerpo es real: ¿son hojas pintadas, u hojas de verdad?
Lo oculto tiene misterio. Y lo misterioso nos atrae, no hay más.
El arte tiene muchas facetas, y el body painting hace que dejemos de ver los cuerpos como tales, y los veamos como una parte más del arte.
Soy una fruta
Esta imagen da algo de grima, y a la vez de asombro. Vemos perfectamente la cabeza de una persona, pero también vemos una piña. Esto hace que nuestra mente explote de la confusión. Aún así, es algo tétrico, y por eso, no dejamos de sorprendernos.
¿Qué fruta hubieras escogido tú para imitar?
La rana
Esto puede ser el trabajo de body painting más impresionante que hayas visto nunca. Vemos aquí cinco cuerpo formando una rana. Los colores son vibrantes, y por eso, a primera vista, vemos lo que es la rana, pero si nos vamos acercando a la imagen, podemos ir distinguiendo los cuerpos.
Tanto la parte principal, como los otros cuerpos, son de lo más realistas. El artista ha sabido componer el lienzo, y descubrimos que es algo impresionante.
Las super heroínas
Sí, estamos ante una visión sexy de algunas heroínas, al desnudo. Porque el trabajo del body painting no solo tiene por qué referirse a la naturaleza, sino también a otras artes, en este caso, a las del cómic. ¿Sabes ya qué heroínas son? Seguro que sí, aunque te hayas tomado tu tiempo observando este cuerpo de heroínas.
Después de esta entrada, seguro que ya te has hecho todo un aficionado del body painting.
La entrada Los 20 cuerpos más increíbles pintados con body painting aparece primero en Ocio.
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Ese hermoso pájaro
Este es uno de los más difíciles de distinguir, porque a primera vista, si no te decimos que es un trabajo de body painting, es posible que no te des cuenta de que lo que hay en realidad en esa fotografía es un cuerpo dibujado.
Si te fijas bien, sí que se ve en los pliegues de la parte azul, que se ve perfectamente que es un cuero de mujer. Si quieres más pistas, puedes ver, al final del pico, el codo de la persona. Lo mejor de estos efectos es que, combinados con un fondo negro, es posible no distinguir apenas nada. Es impresionante.
Ver el amanecer en tu espalda
Podría ser el verso de un poema o de una canción, pero en este caso, llega a ser de lo más literal. Y lo más bonito que hayamos visto en mucho tiempo. El arte tiene muchas formas de expresión, y el body painting es una de ellas. ¿Cómo es posible dotar de esa luminosidad al cuerpo humano?
Algún truco que no sabemos sí que debe de haber, pero de momento, nos quedamos únicamente con esa visión tan espectacular que nos transporta, desde su cuerpo, hasta unas montañas.
Las manos sinuosas
Hasta el trabajo más simple de body painting puede llegar a ser de lo más espectacular. Aquí solo hay unas manos, y las distinguimos perfectamente, pero el body painting no es bueno únicamente cuando no se distingue el cuerpo humano, sino también en el realismo de lo falso.
Es decir, vemos unas manos, pero eso no quiere decir que porque sepamos que son manos, el trabajo es peor. ¿Acaso un cuadro de un paisaje es un mal trabajo solo porque sepamos que es un cuadro? No, el lienzo no es tan importante, aunque aquí es algo que impresiona. El lagarto está bien hecho, y el ojo sobre todo, son impresionantes.
Y atentos bajo la mirada del tigre
Puede que este sea el trabajo de body painting más conocido, o uno de los más conocidos. Y se trata únicamente de aprovechar las formas del cuerpo humano para ver que en la naturaleza, también existen esas formas. Lo que es el hocico del tigre, y la parte del centro, es una mujer agachada.
La composición es bastante buena, y aunque ya conocíamos esta obra, no nos deja nunca de impresionar.
El que se esconde cual camaleón
Otro trabajo magnífico con fondo negro. Nos asombra, sobre todo, porque no solo el trabajo del body painting es bueno, sino también el de la fotografía posterior, para que resalte, sobre todo la luminosidad, y no el cuerpo de la persona.
Así, podemos ver a la derecha del todo, la cara de la persona, pintada de negro. Vemos cómo el pliegue de la pata del camaleón también es el de la persona. Es un trabajo maravilloso. ¿Cuántas personas en el mundo pueden llegar a crear algo así?
La piel seca y baldía
Existen diferentes trabajos de body painting, y no todo se reduce a esconder el cuerpo, sino también de integrarlo en otro medio. Aquí por ejemplo, nos damos cuenta de que hay una persona, sí, pero imita muy bien la textura que hay de fondo, de unos troncos apilados.
En realidad, ver a la persona, también nos impresiona, de ahí que pensemos en la integración entre el medio y el hombre.
El cuerpo como arte
Como ya hemos dicho, vemos que hay diferentes estilos de body painting: mientras unos se lo toman con humor, otros creen que es un lienzo más. Un lienzo que de por sí ya es bello. Y para muestra, este trabajo.
En realidad no tiene una forma en concreto, o nosotros no hemos averiguado qué es, pero aún así, vemos dos cuerpos pintados de una forma exquisita, como si de un patrón de una alfombra se tratara. Es un trabajo minucioso y que requiere mucha dedicación, no solo por parte del artista, sino de los lienzos.
Te escondes tras la pared
Esto es otar muestra de cómo el cuerpo puede integrarse en el medio. Efectivamente, vemos a la modelo, pero es como si estuviera incrustada en la pared. Los diseños del cuerpo se esconden tan bien, que en algunas ocasiones no sabemos dónde empieza el cuerpo y dónde termina el papel pintado.
Aquí, además de body painting, también se trata de ubicarse en un espacio en concreto, para que el ángulo de visión sea el correcto también.
El flamenco
Lo que más sorprende del body painting es que podemos averiguar cuál es la referencia de lo que se está representando, independientemente del cuerpo de la persona. Así, aquí vemos a una persona, que se ha transformado en un flamenco.
Pero el trabajo físico, y el artístico se unen, para dar al que ve, una visión irreal y real del flamenco. De lo majestuoso que es, y de lo asombroso que el cuerpo humano puede llegar a ser.
Kate Upton a la moda
Los trabajos de body painting también sirven para tomárselo con humor algunas veces. Así que si por ejemplo, buscas en Internet, “Kate Upton desnuda”, probablemente te encuentres con esto. ¿Está desnuda? Sí. ¿Completamente? Es posible.
Pero el efecto óptico del body painting nos impide contemplar la desnudez como tal.
Un coche con mucho cuerpo
Las obras de body painting grupales son las más asombrosas porque requieren bastante coordinación, por parte de los cuerpos, y del artista. Así, esto puede llegar a ser una obra maestra. Es un coche, sí, pero hecho a base de cuerpos pintados. Vemos, algunas partes claramente, pero la óptica hace mucho.
Así, aunque el trabajo artístico no parece estar a la altura de otros trabajos, el conjunto es impresionante.
Body painting reinvidicativo
A veces este tipo de arte también sirve para reivindicar algo en concreto. No sabemos el qué, pero en este caso vemos cómo el conjunto de cuerpos van formando la cara del presidente Obama. También es cosa de la perspectiva, que es bastante buena.
¿Y el tipo de detrás? no lo sabemos. Estamos abiertos a interpretaciones.
Y contar tus lunares como si fueran estrellas
Ya vimos el impresionante cuerpo de una mujer y una montaña. Pues imagina ver el universo entero en la espalda de estas mujeres. ¿Es la misma persona? ¿Son gemelas? No lo sabemos, pues se parecen mucho de perfil. Aún así, que eso no reste nuestra atención a la obra.
El resultado es magnífico y casi nos transporta hasta ese lugar.
Y sus manos echaron a volar
Es un trabajo de manos, y aunque sepamos que lo son, a veces nos cuesta ubicar los pulgares. Sí, vemos uno que es la cabeza del águila. ¿Y el otro? Da lo mismo, esto es lo mejor del body painting, mirar la pintura para descifrar en qué parte está cada cosa.
Aquí sí sabemos cuánto tiempo debemos mirar, no como en las obras de arte moderno, que nos quedamos delante pensando como tontos qué es lo que tenemos delante.
Su rostro era digno de ser retratado
El arte que imita el arte, esto es lo que vemos, al menos los que estamos familiarizados con el arte. Porque lo que tenemos aquí es un ejemplo del pop art de Lichtenstein, que imita el estilo del cómic. Pero, ¿dónde está la mujer de verdad? ¿Dónde empieza, y dónde terminan sus facciones?
Es un trabajo completo, que nos rememora otras obras, y ahí está el verdadero trabajo.
El cuerpo al natural
Ese azul hace que recordemos a la tremenda Mística de los X-Men, que también conlleva en la realidad un verdadero trabajo de body painting. Pero no nos desviemos del asunto. Lo magnífico de esta obra es la capacidad de crear luz.
Así, vemos cómo en la zona del vientre, en la parte central del árbol que se representa, hay una luz que viene de detrás, como si estuviera dentro de ella. Puede ser algo simbólico, o nosotros, que estamos divagando, pero nos encanta.
El otoño llegó al cuerpo
Estos trabajos donde se esconde una persona también nos asombra mucho. Dejamos de discernir lo que es real de lo que no. Entonces, también nos preguntamos si lo que rodea al cuerpo es real: ¿son hojas pintadas, u hojas de verdad?
Lo oculto tiene misterio. Y lo misterioso nos atrae, no hay más.
El arte tiene muchas facetas, y el body painting hace que dejemos de ver los cuerpos como tales, y los veamos como una parte más del arte.
Soy una fruta
Esta imagen da algo de grima, y a la vez de asombro. Vemos perfectamente la cabeza de una persona, pero también vemos una piña. Esto hace que nuestra mente explote de la confusión. Aún así, es algo tétrico, y por eso, no dejamos de sorprendernos.
¿Qué fruta hubieras escogido tú para imitar?
La rana
Esto puede ser el trabajo de body painting más impresionante que hayas visto nunca. Vemos aquí cinco cuerpo formando una rana. Los colores son vibrantes, y por eso, a primera vista, vemos lo que es la rana, pero si nos vamos acercando a la imagen, podemos ir distinguiendo los cuerpos.
Tanto la parte principal, como los otros cuerpos, son de lo más realistas. El artista ha sabido componer el lienzo, y descubrimos que es algo impresionante.
Las super heroínas
Sí, estamos ante una visión sexy de algunas heroínas, al desnudo. Porque el trabajo del body painting no solo tiene por qué referirse a la naturaleza, sino también a otras artes, en este caso, a las del cómic. ¿Sabes ya qué heroínas son? Seguro que sí, aunque te hayas tomado tu tiempo observando este cuerpo de heroínas.
Después de esta entrada, seguro que ya te has hecho todo un aficionado del body painting.
La entrada Los 20 cuerpos más increíbles pintados con body painting aparece primero en Ocio.
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