Se dio a conocer hace poco la noticia de que la Comisión Federal de Comunicaciones de EE. UU. (FCC) ha aprobado el regreso de las» reglas de neutralidad de la red« que fueron eliminadas durante la administración de Donald Trump.
La Comisión Federal de Comunicaciones aprobó las reglas en 2015, estas clasificaban a los proveedores de servicios de internet como «proveedores de servicios de comunicaciones» bajo la ley de Comunicaciones, otorgándoles una mayor autoridad para regular la neutralidad de la red. Y fue durante la pandemia de Covid-19 que se dejó claro que la banda ancha es un servicio esencial. La neutralidad de la red se refiere al principio de que:
La FCC voto para restaurar las reglas
Con tres votos a favor entre los cinco miembros votantes, se anunció la restauración de las reglas de neutralidad de la red que prohíben a los proveedores dar una mayor prioridad, bloquear el acceso y limitar la velocidad de acceso a los contenidos y servicios legalmente distribuidos, ya que ahora el acceso a internet se considerará un «servicio de información» en lugar de un «servicio de telecomunicaciones».
Con la restauración de las reglas se menciona que se busca equilibrar las cosas entre los distribuidores de contenidos y los operadores de telecomunicaciones. Las nuevas reglas también otorgarán a la FCC la autoridad para requerir informes sobre fallos, supervisar la seguridad y monitorear la resolución de problemas por parte de los proveedores.
Por su parte, los defensores de la neutralidad de la red, entre los que se encuentran los proveedores de contenidos y servicios en línea, argumentan que todos los tipos de tráfico son igualmente importantes y se oponen a la discriminación que podría surgir si los operadores de telecomunicaciones priorizan ciertos tipos de tráfico sobre otros.
Además de ello se menciona que esta división podría afectar negativamente la calidad del acceso a algunos sitios y tipos de datos mientras beneficia a otros, además de dificultar la entrada de nuevos servicios al mercado al dar ventajas iniciales a aquellos que pueden pagar a los proveedores para priorizar su tráfico. Es por ello que los defensores de la neutralidad de la red creen que estas nuevas normas son cruciales para proteger los derechos de los consumidores y evitar prácticas abusivas por parte de los operadores de telecomunicaciones.
Por el otro lado de la moneda, están quienes se oponen(principalmente los proveedores de Internet y los fabricantes de equipos de red) argumentan a favor de tener la capacidad de cambiar las prioridades del tráfico según su discreción. Esto les permitiría, por ejemplo, establecer acuerdos para cobrar regalías a los proveedores de contenidos a cambio de una mayor velocidad de acceso a sus recursos. También podrían mejorar la calidad del acceso a sus propios servicios limitando la velocidad de los servicios de sus competidores.
Estos opositores a las nuevas reglas también temen que una mayor regulación de los proveedores de banda ancha conduzca a una desaceleración en el desarrollo de la industria de las telecomunicaciones. Además, expresan preocupación por un aumento en la supervisión gubernamental de la industria, argumentando que hasta ahora la neutralidad de la red ha sido regulada eficientemente en el mercado a través de la competencia entre los proveedores de servicios de Internet.
Finalmente si estás interesado en poder conocer más al respecto, puedes consultar los detalles en el siguiente enlace.
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