Hace un par de días, os informamos del acuerdo al que había llegado Qualcomm después de la visita de Donald Trump a China, un acuerdo con el que se aseguraba unos ingresos de 12.000 millones de dólares en los próximos tres años. Este dinero precederá las cuentas de Xiaomi, Vivo y Oppo, los principales fabricantes asiáticos que copan las ventas en China.
Este acuerdo supuso un duro golpe para la compañía MediaTek, una compañía que en los últimos años se había centrado en la gama media y baja, pero que estaba dando sus primeros pasos en la gama media-alta y alta con los procesadores Helio, pero no había conseguido obtener el éxito que deseaba.
Según afirma Finbarr Moynihan, general de ventas internacionales de MediaTek, la compañía ha decidido tomarse un descanso y centrar su desarrollo en la gama media, una gama media que en los últimos años ha bajado considerablemente de precio y se han convertido en una alternativa más que factible para muchos ciudadanos sin tener que invertir un buen dinero en un terminal de gama alta. Los últimos procesadores que presentó la compañía, hace un par de meses, son el Helio P23 y el Helio P30, unos procesadores dirigidos a la gama media alta.
En los últimos años, a Qualcomm le han salido varios competidores, entre los que encontramos a Samsung, una compañía que gracias a los procesadores Exynos, sigue ampliando el número de componentes que vende a terceros además de utilizarlos en sus dispositivos de gama alta con unos resultados más que satisfactorios en comparación con los últimos procesadores de Qualcomm.
Por su parte, Huawei también lleva unos años trabajando e implementando sus procesadores Kirim, unos procesadores que si bien es cierto no ofrecen el mismo rendimiento que Exynos de Samsung o los Snapdragon de Qualcomm, poco a poco se están convirtiendo en una alternativa más a tener en cuenta por los principales fabricantes de terminales de gama media en China.
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