La logística está en el centro del negocio de Amazon. La compañía realiza una enorme cantidad de envíos diarios y si pudiera reducir costes en esta parcela, sus márgenes de beneficio darían un salto. Una de las fórmulas que está investigando el gigante del comercio electrónico para optimizar sus repartos son los drones.
La última patente que ha registrado es una aeronave capaz de pasar de un vuelo en vertical a un vuelo en horizontal. El diseño del dispositivo indica que el despegue se produce en vertical. Los rotores apuntan hacia arriba para elevar al dron. Pero una vez que este alcanza cierta altura se despliegan las alas y el sentido de los rotores queda hacia delante.
Para aterrizar ocurre el proceso inverso y el dispositivo toma tierra verticalmente. Se trata de un cambio de configuración en pleno vuelo, de un multirrotor a un diseño más parecido al de un ala fija. La utilidad que podría tener este dron estaría en un despegue y aterrizaje sencillos, así como un vuelo rápido.
En la mente de todos está el programa Amazon Prime Air. Con él la compañía está probando drones para el reparto de sus productos. De momento solo se trata de experimentos que no tocan el ámbito comercial. Tampoco está clara la fórmula que empleará Amazon a la hora de llevar paquetes mediante estas aeronaves. El secretismo en torno a estos trabajos no contribuye a que salgan a la luz pública más allá de ciertas acciones de marketing.
Dentro del programa se encuadran las patentes que la compañía ha registrado en torno a los drones. Recientemente se conoció que le había sido concedido otro diseño, en este caso de un dirigible que actuaría como lanzadera de drones. La idea es tener una plataforma aérea desde la cual las aeronaves despeguen para volver más tarde. Allí recogen los paquetes, se cargan y retoman el vuelo.
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La última patente que ha registrado es una aeronave capaz de pasar de un vuelo en vertical a un vuelo en horizontal. El diseño del dispositivo indica que el despegue se produce en vertical. Los rotores apuntan hacia arriba para elevar al dron. Pero una vez que este alcanza cierta altura se despliegan las alas y el sentido de los rotores queda hacia delante.
Para aterrizar ocurre el proceso inverso y el dispositivo toma tierra verticalmente. Se trata de un cambio de configuración en pleno vuelo, de un multirrotor a un diseño más parecido al de un ala fija. La utilidad que podría tener este dron estaría en un despegue y aterrizaje sencillos, así como un vuelo rápido.
En la mente de todos está el programa Amazon Prime Air. Con él la compañía está probando drones para el reparto de sus productos. De momento solo se trata de experimentos que no tocan el ámbito comercial. Tampoco está clara la fórmula que empleará Amazon a la hora de llevar paquetes mediante estas aeronaves. El secretismo en torno a estos trabajos no contribuye a que salgan a la luz pública más allá de ciertas acciones de marketing.
Dentro del programa se encuadran las patentes que la compañía ha registrado en torno a los drones. Recientemente se conoció que le había sido concedido otro diseño, en este caso de un dirigible que actuaría como lanzadera de drones. La idea es tener una plataforma aérea desde la cual las aeronaves despeguen para volver más tarde. Allí recogen los paquetes, se cargan y retoman el vuelo.
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