El uso de un teléfono celular es algo que le damos todos o, la gran mayoría de las personas, para no generalizar tanto. Pero no solo son los adolescentes, adultos o personas de edad avanzada que suelen exprimirle el jugo a un móvil, sino también los niños… pero, vamos, esto es algo que podemos ver día a día, por lo que no damos una primicia como tal. Lo que sorprende es el tiempo que los más chicos de la casa suelen utilizar un teléfono.
Un estudio llevado a cabo recientemente por SellCell, y publicado hace unas pocas horas, revela algo interesante: los niños emplean más de 30 horas de su tiempo para usar un teléfono por semana, algo que seguramente sí que llama la atención. La encuesta revela algunos datos más, y a continuación los documentamos.
SellCell es una compañía que se enfoca en realizar comparativas de celulares, pero también suele lanzar encuestas ocasionalmente. La nueva es de la que te hablamos en esta oportunidad, y revela lo anteriormente dicho, pero ha sido elaborada en Estados Unidos, por lo que los resultados pueden variar por país.
El rango de edad de los chicos utilizado para llevar a cabo la investigación se ubicó entre los 4 y 14 años. ¿Y por qué parten desde tan temprana edad? Bueno, porque desde esa edad es que algunos niños suelen adoptar el uso del móvil. De hecho, un 47% de los niños tiene menos de seis años cuando comienzan a usar un teléfono celular, mientras que un 12% de estos tiene entre solo uno y dos años.
Más que usarlos por cuestión propia, son los padres los que los adentran a su utilización. Es más, un 40% de los padres encuestados darles celulares a sus pequeños para así distraerlos y tener un momento de paz. El 25% de estos, por su parte, reveló que gastaron cerca de unos 250 dólares en un celular para sus hijos, para que se mantengan siempre en contacto, obtener beneficios educativos o simplemente permitir que sus hijos hablen con sus amigos; estas fueron las tres razones principales por la que estos dotaban a sus críos de estos terminales.
Estos datos no son muy buenos que digamos. Que los chiquillos de la casa usen tanto un teléfono desde tan temprana edad puede inducirlos a contraer una adicción a estos aparatos. Sin embargo, no todo resulta malo; un buen dato recogido por este estudio afirma que el 88% de los padres tienen acceso a los móviles de los niños, lo que les permite revisarlos y estar al tanto de lo que hacen.
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Para finalizar, SellCell descubrió que el 57% de los niños usan sus teléfonos para jugar, mientras que un 50% lo hace para ver programas de TV o películas en sus móviles.
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