Gran Hermano, es controvertido, gusta o da vergüenza ajena, pero lo cierto, es que los “grandes hermanos” dan que hablar de lo lindo. Tras 15 ediciones, muchos de los concursantes ganadores han pasado al olvido, otros sin embargo, siguen en el candelero.
El ojo que todo lo ve:
Parecía un programa experimental, nadie sabía en qué consistía realmente el concurso. Pero, después de la primera edición, todos salimos de dudas; Gran Hermano es una especie de viaje de fin de curso con desconocidos. Te presentas como candidato, pasas unas pruebas psicológicas y, si tienes chica, entras en una casa con los gastos pagados. Conoces a gente, te peleas con unos, te enamoras de otros y, mientras tanto, la gente que te está viendo, le da de lo lindo al pico comentando tus hazañas.
No hay mayor misterio, es tener el “poder” de observar el comportamiento de gente ajena al sector televisivo. Claro que, una vez sales del concurso, todo cambia, e incluso puede que te conviertas en un rostro conocido con contrato en las tertulias de turno.
No todos los concursantes han sabido, o querido, aprovechar el filón, incluso en la mayoría de ocasiones, concursantes que poco o menos duraron en el reality, a día de hoy son más conocidos que los propios ganadores.
Después de 15 ediciones, muy fan tienes que ser para acordarte de todos los concursantes y ¿de los ganadores? Muchos de ellos, cogieron el maletín y volvieron a su vida cotidiana, otros han participado en más concursos o de vez en cuando, asoman la patita.
Ismael Beiro:
Fue el primero en coger el ansiado maletín de Gran Hermano. Mientras sonaba “So lonely” (The Police), el gaditano se convirtió en un referente, para los que ya, se habían convertido en seguidores del concurso.
Su paso por la casa, es recordado por su gran amistad con Iván, con el que años más tarde volvería a ser compañero de concurso en “Expedición Imposible”. El “pisha”, supo aprovechar la fama y, tras superar un accidente de tráfico, se convirtió en rostro habitual de cadenas locales de tv. También se aventuró en el concurso “La isla de los famosos”, donde no le fue nada mal y casi vuelve a convertirse en ganador.
Ismael Beiro, nunca ha negado su pasión por el sector televisivo, por ello, formalizó sus estudios empresariales centrados en el mundo audiovisual, e impartió clases de interpretación. Siempre que se celera un programa especial de los grandes hermanos, Ismael suele ser un habitual, pues, no hay nada como haber sido el primero en abrir el maletín de la hermandad.
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Sabrina Mahí:
La enamoradiza y discreta Sabrina, supo llegar a los corazones de los “grandes seguidores”. Su paso por Guadalix, estuvo marcado por su relación con Ángel, pero sería al finalizar el concurso cuando empezaría su historia de amor.
La malagueña, es un referente para aquellos concursantes tímidos y sin ganas de gresca, no siempre es necesario tirar un vaso de agua para dar que hablar.
Sabrina y Ángel se mudaron a Alicante y formalizaron su relación con boda y un hijo, pero, fuera de todo pronóstico, poco duró su relación.
La segunda ganadora de Gran Hermano, colaboró en alguna que otra tertulia de Telecinco, en aquel entonces el matinal de Teresa Campos. Sin Embargo, Sabrina se centró en sus estudios y su hijo y, a día de hoy lleva una vida totalmente discreta. En esta edición, serían otros concursantes lo que sacarían más punta a la fama repentina, claro ejemplo es Carlos “El Yoyas”, su mítico “placa, placa” y “hazme un cola cao”, le sirvieron para introducirse como uno de los rostros más recurrentes en televisión.
Javito García:
La tercera edición de Gran Hermano, también quiso premiar la discreción y serenidad. El gallego Javito, se caracterizó por su buen rollo general con el resto de concursantes y, seguramente, hoy en día sería catalogado como “mueble de Ikea”. Es fácil que te hayas olvidado de este concursante, pues pasó por la casa como quien no quiere la cosa. Eso sí, de vez en cuando también se agradece un concursante “normal”.
Javito, no sería entrevistado por la mismísima Milá, pues la tercera edición fue presentada por Pepe Navarro, hecho que también ayudó a la falta de desparpajo general en las galas.
Tras coger el maletín, el gallego invirtió el dinero en varios locales y se casó con su novia de toda la vida. Aún en la tercera edición, la fidelidad no era motivo de aburrimiento y falta de atrevimiento. A pesar de ser uno de los concursantes más discretos, con el paso del tiempo surgieron rumores sobre sus posibles problemas de adicción. En cualquier caso, hoy en día, Javito sigue luchando por su proyecto empresarial, a pesar de haber tenido que cerrar varios locales, y su vida sentimental sigue estable.
Pedro Oliva:
Si necesitas que alguien te ayude a cuidar cabras, Pedro es tu mejor aliado. El cabrero de la cuarta edición de Gran Hermano, se alzó con el premio por “buena persona”, sí, tal cual, porque el hombre de bonachón no quería ver la realidad.
Pedro, es uno de esos concursantes/personaje, pues es difícil que hayas olvidado sus onomatopeyas “cabreras” y, mucho menos, que hayas olvidado sus calcetines blancos infinitos hasta las rodillas.
El maño, ganó en dinero y amor, pues a pesar de que nadie apostaba por sus dotes de seducción, supo conquistar a su compañera Inma. El culebrón, parecía estar asegurado, porque la amada del cabrero estaba embelesada por Matías, el argentino Latin Lover, Pero desde que finalizó el concurso, Inma y Pedro no se han separado, de hecho, se casaron y tienen una hija.
La vida de ambos es bastante discreta, aunque alguna vez que otra, les hemos podido ver. El cabrero, participó en Supervivientes (2007) así como en algún programa especial de Gran Hermano. También, ha colaborado en un programa de cocina de la televisión aragonesa.
Nuria Yánez:
La dulce fresita, no ha vivido un cuento de hadas precisamente. Tras llevarse el maletín, presentó un Call tv y se pasó por algunos programas de televisión recordando su enfrentamiento con una vaca.
Pero la de Sabadell, no supo administrar bien el dinero y hace cuestión de un año, declaró en “Sálvame” que tenía problemas con ciertas deudas. También montó una tienda de ropa “la Boutique de Nuria”, que sigue abierta hoy en día.
Su paso por la casa, es recordado por su característica personalidad infantil, así como por su relación con Nico, el italiano del que se enamoró. En la actualidad, poco más se sabe de la concursante catalana.
Juanjo Mateo:
El taxista alicantino, hizo la ronda pertinente televisiva tras ganar el concurso y volvió a su tierra. En la casa, protagonizó algún que otro momentazo, como su discusión con Bea la legionaria, o su tonteo con la joven Diana a la que llamaba Dulcinea.
Lo cierto, es que Juanjo no se ha lucrado mucho de su posición de ganador, incluso al contrario, pues llegó a declarar que las condiciones del concurso no le parecían justas. Algunas de las noticias que se saben de él, vienen de la mano de terceros. La que fuera su novia fugaz por unos meses, Diana, llegó a declarar que el alicantino le debía dinero.
Todo parece, que al concursante poco le interesan los platós y sigue llevando una vida normal ejerciendo de taxista.
Pepe Herrero:
Fundador del “nominator” y de la estrategia por excelencia en Gran Hermano. Pepe, en vez de aliarse con sus compañeros, lo hizo con la audiencia y la verdad, le salió rentable la jugada. Su compañero de juego fue Dayron y su enamorada en el concurso, la sensible Raquel.
Pepe Herrero, tuvo sus desavenencias con el concurso, varias han sido sus declaraciones en las que afirma que todo el entramado del reality, forma parte de un guión preparado, vamos que está “amañado”. A pesar de ello, Pepe no dejó pasar la oportunidad de concursar en “Gran Hermano, el reencuentro”, llevándose de nuevo el maletín.
Fuera de la casa de Guadalix, Pepe inició una relación con su compañera Ainoa, un amor que llenó varias páginas de la prensa rosa y colaboraciones en tertulias televisivas. Además, el ex azafato de vuelo, se centró en los negocios y protagonizó varios desencuentros con otro ex concursante, Kilo Hernandez, el cual le acusó de regentar un local de alterne.
Idas y venidas aparte, Pepe Herrero parece haberse centrado en una vida tranquila fuera de televisión, pero siempre será referente en gran hermano por su amplio porcentaje con el que obtuvo la victoria, 87,2%.
Naiala Melo:
La joven brasileña, se hizo con el maletín gracias a su espontaneidad. Tuvo una relación con su compañero Dani y vivió la experiencia al máximo.
Naiala, no será recordada como protagonista de alguna bronca mítica de Gran Hermano, pero su carácter afable y sincero, pudo con las controversias de algunos de sus compañeros.
Tras finalizar el concurso, Naiala invirtió el dinero en negocios, un restaurante que a día de hoy sigue funcionando. Hace poco, le hemos podido ver en alguna gala de Gran Hermano, pero siempre discreta y dando poco que hablar. El que fuera su “novio” en el concurso, se introdujo en el sector del porno, mientras que ella optó por centrarse en sus negocios. En pocas revistas le hemos podido ver, eso sí, dejando de lado el Interviú, revista que ha fotografiado a la mayoría de ex concursantes de Gran Hermano.
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Judith Iglesias:
Concursante reserva, gótica y sexóloga. Judith, se ganó el cariño de la audiencia gracias al desplante que sus compañeros le hicieron. De ideas claras y con una sensatez poco habitual en los grandes hermanos, no fue causante de ningún momento tenso en la casa. Al contrario, siempre mostró un carácter conciliador y coherente.
La novena ganadora de Gran Hermano, se llevó el maletín, y siguió con su vida profesional como educadora sexual. Además, Judith aprovechó su faceta de escritora y publicó su libro “las leyes del deseo”. En la actualidad, también colabora de vez en cuando en los debates de Gran Hermano.
Iván Madrazo:
Modelo y novio plantado dos meses antes del pasar por el altar, Iván entró a Gran Hermano pisando fuerte. En este caso, el zaragozano no se escapaba de ninguna lista de desencuentros en la casa, incluso los que parecían ser sus grandes amigos, luego resultaron ser los peores. Junto con su incondicional compañera Almudena (Chiqui), Iván llegó a la final para llevarse el maletín.
Tras el concurso, no ha perdido ocasión de participar en debates del programa, tertulias o visitar algún plató televisivo que otro. Además, junto con otros compañeros, ha recorrido varias ciudades para hacer bolos y llevarse dinerito extra al bolsillo.
Iván Madrazo, no tiene silla fija en la cadena que le dio la fama, pero se ha convertido en un colaborador bastante habitual. Respecto a su vida personal, poco se sabe, fuera de cámaras parece que mantiene una vida todo lo discreta posible.
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Ángel Muñoz:
El concursante hippie de gran hermano, fue vencedor gracias a su buen rollo. Simpático y apaciguador, supo llevarse bien con sus compañeros. Ángel, no es un concursante que puede ser recordado por algún mérito en especial. Probablemente, haya sido uno de los grandes hermanos menos polémicos de todas las ediciones.
Al finalizar el reality, donó parte del dinero a una ONG (Global Humanitaria) y ayudó a su familia a tapar algún que otro agujero negro. Poco quiso saber de los programas de la cadena, negándose ir a los platós para centrarse en su carrera musical. Pero, lo cierto es que no tuvo el éxito que podía esperar y, tras un desapercibido disco “Lo que había soñado”, Ángel volvió al anonimato.
Laura Campos:
Concursante terremoto, sin pelos en la lengua y que dio bastante que hablar. En la edición número 12 de Gran Hermano, se vivieron muchos momentos tensos y controvertidos. Entre ellos, el momento en el que la futura ganadora del concurso, se enamoraba de un compañero, teniendo novio fuera.
Fuera del reality, Laura ha estado al pie del cañón en los programas de la cadena, de hecho, ha participado en Mujeres Hombres y Viceversa, colabora ocasionalmente en el debate y por su puesto, se ha dejado ver por Interviu.
Su noviazgo con Gonzalo, fue motivo de una mini “serie” en la Web de Telecinco, donde ambos mostraban su día a día como enamorados. Tras su ruptura, Laura no dudó en apuntarse como tronista en el ya citado MHYV, así mismo, es muy probable que te la encuentres en alguna discoteca de moda de tu ciudad, pues junto con otros compañeros del programa, se dedica a hacer bolos siempre que puede.
Pepe Flores:
El bailaor catalán de mirada intensa, se comió a sus compañeros con papas fritas. No paró de repetir durante el concurso, que había mucho “paripé” entre los grandes hermanos de la edición y no se cortó a la hora de expresárselo a la audiencia.
Pepe Flores, resultó ser gracioso y directo, sus grandes compañeras de edición, fueron Sindi y Marta “la pinzas”. Tras ganar el concurso, se centró en su sueño, e invirtió el dinero en poder llevar a cabo un espectáculo como bailaor. Lo cierto es que lo consiguió, y ha estado en el teatro durante varios meses.
En la actualidad, ha colaborado ocasionalmente en el debate y, según las redes sociales, parece que Pepe Flores ha encontrado el amor y está viviendo un momento dulce.
Susana Molina:
La joven murciana, fue sin duda una de esas concursantes que vivió al máximo su edición. Se encaprichó de Dani Dj, vivió momentos tensos al tener que convivir con la novia de éste e incluso, le dio tiempo a enamorarse de otro concursante, Gonzalo, con el que hoy en día sigue manteniendo una relación.
No todos sus compañeros, entendieron su actitud, pero Susana no fue protagonista de grandes broncas. Una vez con el maletín en la mano, se fue a Madrid con su novio, donde ambos planean invertir en un negocio mientras terminan sus estudios.
Podemos ver a Susana en alguna que otra colaboración en el Debate de Gran Hermano, pero fuera de algún que otro bolo, la murciana lleva una vida bastante discreta.
Paula González:
Este año, tocó morirse de amor con Paula. A base de gritos, peleas, llantos y risas extravagantes, la hawaiana vivió un concurso de infarto. Durante los primeros 15 días, tuvo una relación de súper amor con Omar, historia que se truncó al entrar la ex, no tan ex, del de la gorra. El drama estaba asegurado, y Paula continuó el concurso cada vez con más fuerza.
Encontró en su hermano Luís un gran apoyo, el cual al parecer se ha convertido en una posible historia de amor. Su rostro está aún muy presente en nuestras pantallas, ahora colabora en el debate de Gran Hermano Vip.
Con el dinero del maletín, la hawaiana tiene, o eso dijo, la intención de donar una parte a una ONG, el resto debemos imaginar que será para disfrutar y celebrar alguna que otra fiesta a base de piñas, flores y cocos.
La entrada Qué fue de los 15 ganadores de gran hermano aparece primero en Ocio.
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El ojo que todo lo ve:
Parecía un programa experimental, nadie sabía en qué consistía realmente el concurso. Pero, después de la primera edición, todos salimos de dudas; Gran Hermano es una especie de viaje de fin de curso con desconocidos. Te presentas como candidato, pasas unas pruebas psicológicas y, si tienes chica, entras en una casa con los gastos pagados. Conoces a gente, te peleas con unos, te enamoras de otros y, mientras tanto, la gente que te está viendo, le da de lo lindo al pico comentando tus hazañas.
No hay mayor misterio, es tener el “poder” de observar el comportamiento de gente ajena al sector televisivo. Claro que, una vez sales del concurso, todo cambia, e incluso puede que te conviertas en un rostro conocido con contrato en las tertulias de turno.
No todos los concursantes han sabido, o querido, aprovechar el filón, incluso en la mayoría de ocasiones, concursantes que poco o menos duraron en el reality, a día de hoy son más conocidos que los propios ganadores.
Después de 15 ediciones, muy fan tienes que ser para acordarte de todos los concursantes y ¿de los ganadores? Muchos de ellos, cogieron el maletín y volvieron a su vida cotidiana, otros han participado en más concursos o de vez en cuando, asoman la patita.
Ismael Beiro:
Fue el primero en coger el ansiado maletín de Gran Hermano. Mientras sonaba “So lonely” (The Police), el gaditano se convirtió en un referente, para los que ya, se habían convertido en seguidores del concurso.
Su paso por la casa, es recordado por su gran amistad con Iván, con el que años más tarde volvería a ser compañero de concurso en “Expedición Imposible”. El “pisha”, supo aprovechar la fama y, tras superar un accidente de tráfico, se convirtió en rostro habitual de cadenas locales de tv. También se aventuró en el concurso “La isla de los famosos”, donde no le fue nada mal y casi vuelve a convertirse en ganador.
Ismael Beiro, nunca ha negado su pasión por el sector televisivo, por ello, formalizó sus estudios empresariales centrados en el mundo audiovisual, e impartió clases de interpretación. Siempre que se celera un programa especial de los grandes hermanos, Ismael suele ser un habitual, pues, no hay nada como haber sido el primero en abrir el maletín de la hermandad.
Sabrina Mahí:
La enamoradiza y discreta Sabrina, supo llegar a los corazones de los “grandes seguidores”. Su paso por Guadalix, estuvo marcado por su relación con Ángel, pero sería al finalizar el concurso cuando empezaría su historia de amor.
La malagueña, es un referente para aquellos concursantes tímidos y sin ganas de gresca, no siempre es necesario tirar un vaso de agua para dar que hablar.
Sabrina y Ángel se mudaron a Alicante y formalizaron su relación con boda y un hijo, pero, fuera de todo pronóstico, poco duró su relación.
La segunda ganadora de Gran Hermano, colaboró en alguna que otra tertulia de Telecinco, en aquel entonces el matinal de Teresa Campos. Sin Embargo, Sabrina se centró en sus estudios y su hijo y, a día de hoy lleva una vida totalmente discreta. En esta edición, serían otros concursantes lo que sacarían más punta a la fama repentina, claro ejemplo es Carlos “El Yoyas”, su mítico “placa, placa” y “hazme un cola cao”, le sirvieron para introducirse como uno de los rostros más recurrentes en televisión.
Javito García:
La tercera edición de Gran Hermano, también quiso premiar la discreción y serenidad. El gallego Javito, se caracterizó por su buen rollo general con el resto de concursantes y, seguramente, hoy en día sería catalogado como “mueble de Ikea”. Es fácil que te hayas olvidado de este concursante, pues pasó por la casa como quien no quiere la cosa. Eso sí, de vez en cuando también se agradece un concursante “normal”.
Javito, no sería entrevistado por la mismísima Milá, pues la tercera edición fue presentada por Pepe Navarro, hecho que también ayudó a la falta de desparpajo general en las galas.
Tras coger el maletín, el gallego invirtió el dinero en varios locales y se casó con su novia de toda la vida. Aún en la tercera edición, la fidelidad no era motivo de aburrimiento y falta de atrevimiento. A pesar de ser uno de los concursantes más discretos, con el paso del tiempo surgieron rumores sobre sus posibles problemas de adicción. En cualquier caso, hoy en día, Javito sigue luchando por su proyecto empresarial, a pesar de haber tenido que cerrar varios locales, y su vida sentimental sigue estable.
Pedro Oliva:
Si necesitas que alguien te ayude a cuidar cabras, Pedro es tu mejor aliado. El cabrero de la cuarta edición de Gran Hermano, se alzó con el premio por “buena persona”, sí, tal cual, porque el hombre de bonachón no quería ver la realidad.
Pedro, es uno de esos concursantes/personaje, pues es difícil que hayas olvidado sus onomatopeyas “cabreras” y, mucho menos, que hayas olvidado sus calcetines blancos infinitos hasta las rodillas.
El maño, ganó en dinero y amor, pues a pesar de que nadie apostaba por sus dotes de seducción, supo conquistar a su compañera Inma. El culebrón, parecía estar asegurado, porque la amada del cabrero estaba embelesada por Matías, el argentino Latin Lover, Pero desde que finalizó el concurso, Inma y Pedro no se han separado, de hecho, se casaron y tienen una hija.
La vida de ambos es bastante discreta, aunque alguna vez que otra, les hemos podido ver. El cabrero, participó en Supervivientes (2007) así como en algún programa especial de Gran Hermano. También, ha colaborado en un programa de cocina de la televisión aragonesa.
Nuria Yánez:
La dulce fresita, no ha vivido un cuento de hadas precisamente. Tras llevarse el maletín, presentó un Call tv y se pasó por algunos programas de televisión recordando su enfrentamiento con una vaca.
Pero la de Sabadell, no supo administrar bien el dinero y hace cuestión de un año, declaró en “Sálvame” que tenía problemas con ciertas deudas. También montó una tienda de ropa “la Boutique de Nuria”, que sigue abierta hoy en día.
Su paso por la casa, es recordado por su característica personalidad infantil, así como por su relación con Nico, el italiano del que se enamoró. En la actualidad, poco más se sabe de la concursante catalana.
Juanjo Mateo:
El taxista alicantino, hizo la ronda pertinente televisiva tras ganar el concurso y volvió a su tierra. En la casa, protagonizó algún que otro momentazo, como su discusión con Bea la legionaria, o su tonteo con la joven Diana a la que llamaba Dulcinea.
Lo cierto, es que Juanjo no se ha lucrado mucho de su posición de ganador, incluso al contrario, pues llegó a declarar que las condiciones del concurso no le parecían justas. Algunas de las noticias que se saben de él, vienen de la mano de terceros. La que fuera su novia fugaz por unos meses, Diana, llegó a declarar que el alicantino le debía dinero.
Todo parece, que al concursante poco le interesan los platós y sigue llevando una vida normal ejerciendo de taxista.
Pepe Herrero:
Fundador del “nominator” y de la estrategia por excelencia en Gran Hermano. Pepe, en vez de aliarse con sus compañeros, lo hizo con la audiencia y la verdad, le salió rentable la jugada. Su compañero de juego fue Dayron y su enamorada en el concurso, la sensible Raquel.
Pepe Herrero, tuvo sus desavenencias con el concurso, varias han sido sus declaraciones en las que afirma que todo el entramado del reality, forma parte de un guión preparado, vamos que está “amañado”. A pesar de ello, Pepe no dejó pasar la oportunidad de concursar en “Gran Hermano, el reencuentro”, llevándose de nuevo el maletín.
Fuera de la casa de Guadalix, Pepe inició una relación con su compañera Ainoa, un amor que llenó varias páginas de la prensa rosa y colaboraciones en tertulias televisivas. Además, el ex azafato de vuelo, se centró en los negocios y protagonizó varios desencuentros con otro ex concursante, Kilo Hernandez, el cual le acusó de regentar un local de alterne.
Idas y venidas aparte, Pepe Herrero parece haberse centrado en una vida tranquila fuera de televisión, pero siempre será referente en gran hermano por su amplio porcentaje con el que obtuvo la victoria, 87,2%.
Naiala Melo:
La joven brasileña, se hizo con el maletín gracias a su espontaneidad. Tuvo una relación con su compañero Dani y vivió la experiencia al máximo.
Naiala, no será recordada como protagonista de alguna bronca mítica de Gran Hermano, pero su carácter afable y sincero, pudo con las controversias de algunos de sus compañeros.
Tras finalizar el concurso, Naiala invirtió el dinero en negocios, un restaurante que a día de hoy sigue funcionando. Hace poco, le hemos podido ver en alguna gala de Gran Hermano, pero siempre discreta y dando poco que hablar. El que fuera su “novio” en el concurso, se introdujo en el sector del porno, mientras que ella optó por centrarse en sus negocios. En pocas revistas le hemos podido ver, eso sí, dejando de lado el Interviú, revista que ha fotografiado a la mayoría de ex concursantes de Gran Hermano.
Judith Iglesias:
Concursante reserva, gótica y sexóloga. Judith, se ganó el cariño de la audiencia gracias al desplante que sus compañeros le hicieron. De ideas claras y con una sensatez poco habitual en los grandes hermanos, no fue causante de ningún momento tenso en la casa. Al contrario, siempre mostró un carácter conciliador y coherente.
La novena ganadora de Gran Hermano, se llevó el maletín, y siguió con su vida profesional como educadora sexual. Además, Judith aprovechó su faceta de escritora y publicó su libro “las leyes del deseo”. En la actualidad, también colabora de vez en cuando en los debates de Gran Hermano.
Iván Madrazo:Modelo y novio plantado dos meses antes del pasar por el altar, Iván entró a Gran Hermano pisando fuerte. En este caso, el zaragozano no se escapaba de ninguna lista de desencuentros en la casa, incluso los que parecían ser sus grandes amigos, luego resultaron ser los peores. Junto con su incondicional compañera Almudena (Chiqui), Iván llegó a la final para llevarse el maletín.
Tras el concurso, no ha perdido ocasión de participar en debates del programa, tertulias o visitar algún plató televisivo que otro. Además, junto con otros compañeros, ha recorrido varias ciudades para hacer bolos y llevarse dinerito extra al bolsillo.
Iván Madrazo, no tiene silla fija en la cadena que le dio la fama, pero se ha convertido en un colaborador bastante habitual. Respecto a su vida personal, poco se sabe, fuera de cámaras parece que mantiene una vida todo lo discreta posible.
Ángel Muñoz:
El concursante hippie de gran hermano, fue vencedor gracias a su buen rollo. Simpático y apaciguador, supo llevarse bien con sus compañeros. Ángel, no es un concursante que puede ser recordado por algún mérito en especial. Probablemente, haya sido uno de los grandes hermanos menos polémicos de todas las ediciones.
Al finalizar el reality, donó parte del dinero a una ONG (Global Humanitaria) y ayudó a su familia a tapar algún que otro agujero negro. Poco quiso saber de los programas de la cadena, negándose ir a los platós para centrarse en su carrera musical. Pero, lo cierto es que no tuvo el éxito que podía esperar y, tras un desapercibido disco “Lo que había soñado”, Ángel volvió al anonimato.
Laura Campos:
Concursante terremoto, sin pelos en la lengua y que dio bastante que hablar. En la edición número 12 de Gran Hermano, se vivieron muchos momentos tensos y controvertidos. Entre ellos, el momento en el que la futura ganadora del concurso, se enamoraba de un compañero, teniendo novio fuera.
Fuera del reality, Laura ha estado al pie del cañón en los programas de la cadena, de hecho, ha participado en Mujeres Hombres y Viceversa, colabora ocasionalmente en el debate y por su puesto, se ha dejado ver por Interviu.
Su noviazgo con Gonzalo, fue motivo de una mini “serie” en la Web de Telecinco, donde ambos mostraban su día a día como enamorados. Tras su ruptura, Laura no dudó en apuntarse como tronista en el ya citado MHYV, así mismo, es muy probable que te la encuentres en alguna discoteca de moda de tu ciudad, pues junto con otros compañeros del programa, se dedica a hacer bolos siempre que puede.
El bailaor catalán de mirada intensa, se comió a sus compañeros con papas fritas. No paró de repetir durante el concurso, que había mucho “paripé” entre los grandes hermanos de la edición y no se cortó a la hora de expresárselo a la audiencia.
Pepe Flores, resultó ser gracioso y directo, sus grandes compañeras de edición, fueron Sindi y Marta “la pinzas”. Tras ganar el concurso, se centró en su sueño, e invirtió el dinero en poder llevar a cabo un espectáculo como bailaor. Lo cierto es que lo consiguió, y ha estado en el teatro durante varios meses.
En la actualidad, ha colaborado ocasionalmente en el debate y, según las redes sociales, parece que Pepe Flores ha encontrado el amor y está viviendo un momento dulce.
Susana Molina:
La joven murciana, fue sin duda una de esas concursantes que vivió al máximo su edición. Se encaprichó de Dani Dj, vivió momentos tensos al tener que convivir con la novia de éste e incluso, le dio tiempo a enamorarse de otro concursante, Gonzalo, con el que hoy en día sigue manteniendo una relación.
No todos sus compañeros, entendieron su actitud, pero Susana no fue protagonista de grandes broncas. Una vez con el maletín en la mano, se fue a Madrid con su novio, donde ambos planean invertir en un negocio mientras terminan sus estudios.
Podemos ver a Susana en alguna que otra colaboración en el Debate de Gran Hermano, pero fuera de algún que otro bolo, la murciana lleva una vida bastante discreta.
Paula González:
Este año, tocó morirse de amor con Paula. A base de gritos, peleas, llantos y risas extravagantes, la hawaiana vivió un concurso de infarto. Durante los primeros 15 días, tuvo una relación de súper amor con Omar, historia que se truncó al entrar la ex, no tan ex, del de la gorra. El drama estaba asegurado, y Paula continuó el concurso cada vez con más fuerza.
Encontró en su hermano Luís un gran apoyo, el cual al parecer se ha convertido en una posible historia de amor. Su rostro está aún muy presente en nuestras pantallas, ahora colabora en el debate de Gran Hermano Vip.
Con el dinero del maletín, la hawaiana tiene, o eso dijo, la intención de donar una parte a una ONG, el resto debemos imaginar que será para disfrutar y celebrar alguna que otra fiesta a base de piñas, flores y cocos.
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