Aunque no lo sepas, tienes en tu despensa los ingredientes suficientes para hacer un cóctel molotov destinado a tu cuerpo. Si quieres llegar a ser inmortal, uno de los caminos que no debes tomar, es el que tiene estos alimentos. ¿Quieres saber cuáles son?
Sandwiches de tienda
Vale, todos sabemos que los sandwiches no son buenos. Pero cenar alguno, de vez en cuando no está tan mal. Pero eso es si los hacemos nosotros mismos. Pero cuando compramos en una tienda un sandwich que ya está hecho, empaquetado, es mucho peor, puesto que no sabemos qué aditivos y conservantes tiene.
Y aunque sepamos cuáles son los componentes y los elementos de los sandwiches, no quiere decir que sean mucho más sanos. Así que lo mejor, si nos apetece tener un tentempié de medianoche, lo mejor es que lo hagamos nosotros mismos: y si es con pan integral y con pavo, mucho mejor.
Apúntatelo: nada de comprar sandwiches prefabricados y con conservantes.
Galletas
Las galletas, ya de por sí, no son muy sanas, porque lleva demasiado azúcar. Pero lo peor es el frosting, es decir, eso dulce que recubre la galleta. Y si es de un color que no parece muy natural, mucho peor, puesto que es mucho más artificial.
¿Y si son galletas naturales? Te da un pase, siempre que no abuses de ello. Tampoco vale eso de comerte una galleta al día, porque a la larga también puede ser contraproducente y malo para tu salud. Las galletas caseras son mucho más sanas, por supuesto, pero si llevan decoraciones de ese tipo, frosting de mantequilla, el resultado será el mismo.
Palomitas de microondas
Sí, son fáciles de usar: solo hay que abrir el paquete, y ponerlo en el microondas. En tres o cuatro minutos a lo sumo, tenías palomitas con un gran sabor en un bol, listo para ver una película, o algo similar. Pero hay dos o tres cosas que no sabes de este snack.
Así, para empezar, hay que decir que la propia bolsa que metes en el microondas es muy tóxica, y las palomitas en sí contienen emulsionantes y aceites bastante dañinos para la salud humana.
Lo peor de todo es cuando llevan escrito “sabor a mantequilla”, porque para conseguir eso, añaden diacetileno, un químico que añaden para darle el sabor, y que muchas marcas han tenido que quitar precisamente por eso.
Pizza congelada
No hay mucho que decir de este tipo de cosas. Porque la pizza en sí, con todas las calorías que tiene, es peligrosa ya para tu corazón con solo existir.
Una porción de pizza ya solo tiene 400 o 500 calorías. Y eso ya es mucho. Por no decir que cuando comemos, no solo comemos una ración, sino dos o tres. Así que estamos comiendo, como mínimo 1000 calorías en una cena. Y eso ya es energía para todo un día.
Por supuesto, si hacemos la pizza nosotros mismos, podemos rebajar un poco las calorías, porque controlamos los ingredientes. Pero aunque tenga menos conservantes, no podemos afirmar que es un snack sano, lo que nos hace preguntarnos: ¿hay algún snack que sea de verdad sano?
Refrescos
Es una de las cosas más adictivas que existen: los refrescos. Su nombre es de lo más acertado, nos refrescan, pero también llenan nuestro estómago de azúcares y de gases, con un ligero sabor a cola, o a naranja. O a lo que más nos guste.
Pero evidentemente, no es algo que sea demasiado sano. ¿Una alternativa? El agua, o los zumos naturales. Incluso algunos batidos pueden llegar a ser más sanos. Las bebidas naturales, como las infusiones son, en definitiva, una alternativa mucho más sana.
Incluso el café o el té sería preferible que tomar todos los días una lata de cualquiera de estos refrescos.
Patatas fritas
Las patatas fritas nos encantan. Podríamos vivir nuestra vida entera a base de patatas fritas y de sus alternativas: con sabor a sal, a pimienta, con vinagreta, o de esas que apenas tienen sal, y que dicen que son sanas. Pero no lo son. En cualquier caso, nos gustan tanto que podríamos morir por ellas.
Y probablemente, si tuviéramos ese estilo de vida, podríamos morir por esa causa. porque las grasas saturas, que en pequeñas cantidades son limitadas, en grandes cantidades pueden provocarnos problemas para el corazón y nuestro sistema digestivo. Así que mejor no arriesgarnos, y limitar el consumo de esto.
Una vez al mes, como mucho. ¿Por qué? Porque sabemos que si empezamos, no vamos a parar. Y compraremos otra bolsa. Y otra más.
Cereales
Pensamos que los cerales son una alternativa sana a la merienda. Que podemos matar el hambre, de una manera sana, si comemos un tazón de cereales. De hecho, hay muchas dietas que suplen una comida del día por un tazón de este alimento. Pero todo es falso. Igual si nos morimos de hambre y comemos un puñado de cereales en lugar de una cena completa, podemos adelgazar, pero de otra manera no sería posible.
Y menos si lo que comemos continen un montón de químicos artificiales para dar sabor, olor y color a esas pequeñas perlas que hace tiempo que dejaron de ser cereales.
Salsa para acompañar
Evidentemente, si lo que la salsa acompaña son unos nuggets, o unas alas de pollo, no hace falta decir que son muy perjudiciales. Pero hay otras personas que prefieren comer apio, o palitos de zanahoria cruda. Claro que estos snacks son, y lo afirmamos, muy sanos.
Lo que no es, para nada sano, es la salsa ranchera que suele acompañar. Tanto si es salsa de yogur, como si es salsa mil islas, te podemos asegurar que es una de las formas a las que añadir cientos de calorías a tu cuerpo en menos de un solo bocado. ¿No te lo crees? Que sean tus caderas quienes juzguen eso entonces.
Cualquier tentempié salado
Sí: galletitas saladas, palitos tostados, o galletas en forma de pez. Da igual qué forma tengan y cuántas comas, porque una vez que comes uno, empezarás hasta dejar tu cuenco medio vacío. Y luego vendrá el arrepentimiento. Y después, las ganas de suplir la culpa con otra sensación.
Pero el vacío está ahí. Y no, las galletas no ayudarán a arreglar este estropicio. Deja de comer tantas galletas y empieza a mantenerte ocupada. ¿Quieres algo que morder mientras ves la película? Elige una fruta y cómetela a mordiscos. O cómprate unos frutos secos, si son para pelar mucho mejor, pues te llevarán mucho más tiempo, y comerás menos. Cualquier truco funciona con tal de mantenerse ocupado.
Zumos de frutas
Ya hemos dicho antes que el zumo es una buena alternativa a los refrescos. Siempre y cuando nos estemos refiriendo a un zumo que no sea de tetra brick, es decir, un zumo que sea totalmente natural y que sea de frutas, sin ningún colorante ni aditivo artificial.
Normalmente, aunque los zumos de frutas suelen ser más sanos (aunque no más baratos), podemos tener un subidón de azúcar bastante fuerte, si merendamos todos los días alguno de estos zumos. Por supuesto, tienes una alternativa natural que te llevará más tiempo, más dinero, pero será mucho más saludable: hacer tus propios zumos de frutas. Tanto si quieres adelgazar, como si solo quieres saber qué sabor tiene, es una buena opcíón para todos los que quieran mantener una vida algo mejor que la anterior.
La entrada Snacks que no son sanos aparece primero en Ocio.
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Sandwiches de tienda
Vale, todos sabemos que los sandwiches no son buenos. Pero cenar alguno, de vez en cuando no está tan mal. Pero eso es si los hacemos nosotros mismos. Pero cuando compramos en una tienda un sandwich que ya está hecho, empaquetado, es mucho peor, puesto que no sabemos qué aditivos y conservantes tiene.
Y aunque sepamos cuáles son los componentes y los elementos de los sandwiches, no quiere decir que sean mucho más sanos. Así que lo mejor, si nos apetece tener un tentempié de medianoche, lo mejor es que lo hagamos nosotros mismos: y si es con pan integral y con pavo, mucho mejor.
Apúntatelo: nada de comprar sandwiches prefabricados y con conservantes.
Galletas
Las galletas, ya de por sí, no son muy sanas, porque lleva demasiado azúcar. Pero lo peor es el frosting, es decir, eso dulce que recubre la galleta. Y si es de un color que no parece muy natural, mucho peor, puesto que es mucho más artificial.
¿Y si son galletas naturales? Te da un pase, siempre que no abuses de ello. Tampoco vale eso de comerte una galleta al día, porque a la larga también puede ser contraproducente y malo para tu salud. Las galletas caseras son mucho más sanas, por supuesto, pero si llevan decoraciones de ese tipo, frosting de mantequilla, el resultado será el mismo.
Palomitas de microondas
Sí, son fáciles de usar: solo hay que abrir el paquete, y ponerlo en el microondas. En tres o cuatro minutos a lo sumo, tenías palomitas con un gran sabor en un bol, listo para ver una película, o algo similar. Pero hay dos o tres cosas que no sabes de este snack.
Así, para empezar, hay que decir que la propia bolsa que metes en el microondas es muy tóxica, y las palomitas en sí contienen emulsionantes y aceites bastante dañinos para la salud humana.
Lo peor de todo es cuando llevan escrito “sabor a mantequilla”, porque para conseguir eso, añaden diacetileno, un químico que añaden para darle el sabor, y que muchas marcas han tenido que quitar precisamente por eso.
Pizza congelada
No hay mucho que decir de este tipo de cosas. Porque la pizza en sí, con todas las calorías que tiene, es peligrosa ya para tu corazón con solo existir.
Una porción de pizza ya solo tiene 400 o 500 calorías. Y eso ya es mucho. Por no decir que cuando comemos, no solo comemos una ración, sino dos o tres. Así que estamos comiendo, como mínimo 1000 calorías en una cena. Y eso ya es energía para todo un día.
Por supuesto, si hacemos la pizza nosotros mismos, podemos rebajar un poco las calorías, porque controlamos los ingredientes. Pero aunque tenga menos conservantes, no podemos afirmar que es un snack sano, lo que nos hace preguntarnos: ¿hay algún snack que sea de verdad sano?
Refrescos
Es una de las cosas más adictivas que existen: los refrescos. Su nombre es de lo más acertado, nos refrescan, pero también llenan nuestro estómago de azúcares y de gases, con un ligero sabor a cola, o a naranja. O a lo que más nos guste.
Pero evidentemente, no es algo que sea demasiado sano. ¿Una alternativa? El agua, o los zumos naturales. Incluso algunos batidos pueden llegar a ser más sanos. Las bebidas naturales, como las infusiones son, en definitiva, una alternativa mucho más sana.
Incluso el café o el té sería preferible que tomar todos los días una lata de cualquiera de estos refrescos.
Patatas fritas
Las patatas fritas nos encantan. Podríamos vivir nuestra vida entera a base de patatas fritas y de sus alternativas: con sabor a sal, a pimienta, con vinagreta, o de esas que apenas tienen sal, y que dicen que son sanas. Pero no lo son. En cualquier caso, nos gustan tanto que podríamos morir por ellas.
Y probablemente, si tuviéramos ese estilo de vida, podríamos morir por esa causa. porque las grasas saturas, que en pequeñas cantidades son limitadas, en grandes cantidades pueden provocarnos problemas para el corazón y nuestro sistema digestivo. Así que mejor no arriesgarnos, y limitar el consumo de esto.
Una vez al mes, como mucho. ¿Por qué? Porque sabemos que si empezamos, no vamos a parar. Y compraremos otra bolsa. Y otra más.
Cereales
Pensamos que los cerales son una alternativa sana a la merienda. Que podemos matar el hambre, de una manera sana, si comemos un tazón de cereales. De hecho, hay muchas dietas que suplen una comida del día por un tazón de este alimento. Pero todo es falso. Igual si nos morimos de hambre y comemos un puñado de cereales en lugar de una cena completa, podemos adelgazar, pero de otra manera no sería posible.
Y menos si lo que comemos continen un montón de químicos artificiales para dar sabor, olor y color a esas pequeñas perlas que hace tiempo que dejaron de ser cereales.
Salsa para acompañar
Evidentemente, si lo que la salsa acompaña son unos nuggets, o unas alas de pollo, no hace falta decir que son muy perjudiciales. Pero hay otras personas que prefieren comer apio, o palitos de zanahoria cruda. Claro que estos snacks son, y lo afirmamos, muy sanos.
Lo que no es, para nada sano, es la salsa ranchera que suele acompañar. Tanto si es salsa de yogur, como si es salsa mil islas, te podemos asegurar que es una de las formas a las que añadir cientos de calorías a tu cuerpo en menos de un solo bocado. ¿No te lo crees? Que sean tus caderas quienes juzguen eso entonces.
Cualquier tentempié salado
Sí: galletitas saladas, palitos tostados, o galletas en forma de pez. Da igual qué forma tengan y cuántas comas, porque una vez que comes uno, empezarás hasta dejar tu cuenco medio vacío. Y luego vendrá el arrepentimiento. Y después, las ganas de suplir la culpa con otra sensación.
Pero el vacío está ahí. Y no, las galletas no ayudarán a arreglar este estropicio. Deja de comer tantas galletas y empieza a mantenerte ocupada. ¿Quieres algo que morder mientras ves la película? Elige una fruta y cómetela a mordiscos. O cómprate unos frutos secos, si son para pelar mucho mejor, pues te llevarán mucho más tiempo, y comerás menos. Cualquier truco funciona con tal de mantenerse ocupado.
Zumos de frutas
Ya hemos dicho antes que el zumo es una buena alternativa a los refrescos. Siempre y cuando nos estemos refiriendo a un zumo que no sea de tetra brick, es decir, un zumo que sea totalmente natural y que sea de frutas, sin ningún colorante ni aditivo artificial.
Normalmente, aunque los zumos de frutas suelen ser más sanos (aunque no más baratos), podemos tener un subidón de azúcar bastante fuerte, si merendamos todos los días alguno de estos zumos. Por supuesto, tienes una alternativa natural que te llevará más tiempo, más dinero, pero será mucho más saludable: hacer tus propios zumos de frutas. Tanto si quieres adelgazar, como si solo quieres saber qué sabor tiene, es una buena opcíón para todos los que quieran mantener una vida algo mejor que la anterior.
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