Noticia Análisis de Assassin’s Creed: Unity

HEADER.jpg

Assassin’s Creed vuelve a Europa tras dos entregas al otro lado del charco justo a tiempo para que la eterna batalla entre templarios y asesinos pueda entrometerse en uno de los eventos más importantes del viejo continente, la Revolución francesa. ¿Será más de lo mismo en otra ubicación?Un año más, un Assassin’s Creed más a las espaldas de Ubisoft. Con cada entrega son muchos los que se preguntan si merecerá la pena pasar de nuevo por caja; y es que son ya siete los títulos que componen la recurrente saga.

Hasta hace unos años años yo mismo me mostraba escéptico pero cuando me di cuenta que siempre terminaba comprando todos, dejé de luchar y me rendí a sus pies.

ACU-media-SS-2-big_147451-800x450.jpg


Cogidos de su mano hemos tenido la oportunidad de visitar Jerusalén, Florencia, Roma, Estambul, Boston y La Habana entre otras ciudades con sus fieles reproducciones (dentro de lo posible) en diversos eventos históricos.

Esta vez se nos brinda la oportunidad de visitar una grandiosa París del siglo XVIII en plena gestación de la Revolución francesa. ##Les Misérables

Abstergo ha evolucionado el programa Animus hasta convertirlo en una herramienta de entretenimiento desde la cual cualquiera puede vivir sucesos en diferentes épocas y lugares; pero como siempre con sus propios propósitos. Al igual que sucede con la anterior entrega, Black Flag, todo gira en torno a encontrar cierto sabio antes de que lo hagan los templarios.

Pero en esta ocasión no daremos vueltas sin sentido por una oficina de Abstergo Entertainment a las órdenes de voces anónimas. En Unity no hay control de ningún personaje en el presente. Todo el juego sucede en París muy acertadamente en mi opinión. Con Desmond todavía tenía algo de interés la trama del presente pero desde luego lo que ocurrió en Black Flag era insoportable. Un juego focalizado es un juego feliz.

ACU-media-SS-11-big_147460-800x450.jpg


Assassins_Creed_Unity_ArnoAndElise_Children_166313-800x450.jpg


Assassins_Creed_Unity_Environment_Climbing_166326-800x450.jpg


Connor en Assassin’s Creed III y Edward Kenway en IV: Black Flag. Siguiendo esta dinámica de personajes nuevos y desconocidos para cada nueva entrega que sin saber cómo acaban en la liga de los asesinos, nos presentan a Arno Dorian aunque tampoco hay mucho que decir sobre este personaje. Si no es el mítico Altair o incluso Ezio Auditore, poco nos importa quién empuña la hoja bajo esa capucha.

Prepárate para intentar memorizar nombres en francés.Nuestra misión, la de nuestro “yo” que está usando el Animus, es revivir las experiencias de Arno quien en algún momento de su vida como miembro de los asesinos parisinos conoció al sabio que Abstergo trata de localizar.

Muchos personajes con muchos nombres en francés que nos costará recordar a lo largo del juego y terminaremos jugando al "¿Quién es quién?" durante las secuencias intentando saber de quién nos están hablando o quién es ese al que tenemos que asesinar. Pero es lo de siempre, no llega a importar tanto mientras resulte entretenido.

Si en la Assassin’s Creed III tuvimos el honor de conocer a George Washington ahora tendremos la ocasión de que nos introduzcan a Napoleón Bonaparte que ha sido doblado al español por Christian Gálvez (Pasapalabra) con un resultado un tanto cuestionable.

La Ville lumière


ACU-media-SS-6-big_147455-800x450.jpg


París, la ciudad que Ubisoft ha elegido para emplazar los acontecimientos, es grande, enorme, descomunal y sobre todo preciosa. Las visitas que ofrecen las azoteas de los edificios es maravillosa y al sincronizar desde una atalaya (lo que solían ser las atalayas) nos quedamos atónitos o así nos quedaríamos si no hubiesen puesto niebla en la distancia para disimular lo que no pueden mover las consolas.

Pero no sólo es el exterior, ahora podremos atravesar algunos edificios por puertas, ventanas y balcones completamente decoradas y habitadas. Parece poca cosa pero es una locura que los edificios no sean simples bloques puestos ahí, sino que también tienen un cuidado detalle interior. Desde sencillas casas de varios pisos hasta palacios o catedrales, como la impresionante recreación de Notre Dame.

ACU-media-SS-3-big_147452-800x450.jpg


ACU-media-SS-8-big_147457-800x450.jpg


Tratando de sacar partido a la nueva generación de consolas nos encontraremos con una ciudad con las calles abarrotadas de gente y plazas con manifestaciones por las que nos será imposible pasar a través de la muchedumbre forzando más al jugador a hacer uso del parkour parisino.

Correr por las calles para desplazarse de un punto a otro puede parecer divertido, pero París es demasiado grande.Parece que hay una tendencia en los juegos de mundo abierto que dice que cuanto más grande sea el mapa, mejor. No comparto ese sentimiento, o al menos depende del juego. En Grand Theft Auto, es genial tener millas y millas por las que conducir con tu emisora de radio favorita de fondo. Pero en Assassin’s Creed donde tu medio de transporte es correr por las calles y saltar de edificio en edificio, se puede hacer pesado moverse de un punto a otro. París es excesivamente grande. He sentido la necesidad de utilizar la funcion de “viaje rápido” en más de una ocasión, cosa que muy rara vez hago en otros titulo similares.

Así como en otros títulos de Ubisoft (Watch Dogs) las misiones secundarias se sienten como estás todo el tiempo haciendo exactamente lo mismo, esto no sucede en Assassin’s Creed: Unity. Este aspecto se ha ido cuidado con el paso de los años hasta el punto de que la variedad ahora es ciertamente para todos los gustos introduciendo como novedad la posibilidad de resolver casos de asesinato juntando pruebas o resolver acertijos. Si eres de lo que disfrutan haciendo este tipo de cometidos, estás de enhorabuena porque te encontrarás con una cada dos pasos.

Por motivos que se explican durante el progreso de Assassin’s Creed: Unity, puntualmente atravesaremos agujeros temporales que nos permitirá visitar brevemente el París en otras épocas como cuando se encontraba sitiada por los nazis durante la Segunda Guerra Mundial donde tendremos que escalar la torre Eiffel o la eternamente mágica Belle Époque. Aunque son fragmentos breves, resultan una grata experiencia para el jugador.

Liberté, égalité, fraternité


ACU-media-SS-1-big_147449-800x450.jpg


La jugabilidad del juego es la de siempre a grandes rasgos: correr, saltar, trepar, pelear, etc. En eso el juego no ha cambiado demasiado a lo largo de la franquicia. Siempre pequeñas mejoras pero sin romper el sistema actual; sistema que por cierto sigue con sus pequeños fallos.

Algunos movimientos pueden ser frustrantes.El parkour, el movimiento principal de Assassin’s Creed que nos permite movernos por cualquier superficie, sigue en ese punto donde Arno se enganchará a cualquier borde, consiguiendo momentos realmente frustrantes como correr en círculos en una fuente por no poder bajar.

El reto de realizar las misiones de forma discreta ha ido reduciéndose a lo largo de los años hasta el punto que a día de hoy no es un factor tan relevante. De hecho pocas misiones nos exigirán que evitemos ser detectados. Puedes hacerlo, de hecho sientes que es más “puro” hacerlo así, pero el juego no te obligara a ello como solía pasar anteriormente.

ACU_Dead-Kings_DLC_2-Flying_Street_Logo_174221-800x450.jpg


En cambio, otros aspectos de la serie han cambiado dando más libertad y opciones de personalización. Por un lado han introducido un modelo de perks (ventajas) que ampliarán el rango de habilidades de nuestro personaje, pudiendo potenciar el sigilo, el combate cuerpo a cuerpo o la resistencia. Además se ampliando hasta el punto de abrumador las opciones de equipamiento y armas con diferentes bonificaciones cada una de ellas. Para gustos los colores, que también hay una veintena para elegir.

Nota: Lamentablemente no hemos tenido oportunidad de probar el modo cooperativo ya que los servidores no estaban operativos durante la fase de prensa. Teníamos muchas ganas ya que esta opción es la mayor novedad introducida en Unity permitiendonos jugar misiones con hasta 3 amigos más. Esperamos poder probarlo cuanto antes y entonces actualizaremos este análisis debidamente.8Claramente Ubisoft ha vuelto a los orígenes de la saga en lo que respecta a elegir una única ubicación, especialmente al dejar los combates navales de las últimas entregas de lado. Por el contrario el sistema de sigilo ha evolucionado para dejar de ser algo obligatorio y permitir que ahora sea algo opcional. Se siente un juego más libre tanto en misiones con en personalización.

Aunque considero que es una elección acertada (otro título con barcos sería excesivo) reconozco que me dejó mejor sabor de boca Black Flag por su variedad de escenarios y opciones radicalmente variadas a la hora de jugar como correr por las calles de La Habana, cazar jaguares en islas paradisíacas o conquistar el mar del Caribe. En París siento que, aunque las misiones principales y secundarias son bien dispares, estoy haciendo lo mismo todo el tiempo.

De todas formas estamos ante Assassin’s Creed, una saga que a pesar de los cambios introducidos a lo largo de los años, siempre mantiene el mismo núcleo de jugabilidad que, pese a todas las críticas, funciona perfectamente y proporciona una buena cantidad de horas. - París está diseñada con mucho esmero. - Pese a no ser los mejores gráficos de la generación, luce bastante bien para lo grande que es. - Cantidad y variedad de las misiones secundarias. - Adictivo y entretenido. Recupera la magia de las primeras entregas. - París es demasiado grande. - El argumento reciclado de entrega anteriores. - El sistema de parkour se siente frustrante en ocasiones. - Tiempos de carga excesivos.

mf.gif







a2t.img
JhYmt-Hx0fI


Continúar leyendo...