Los amantes de los juegos chorra para teléfono móvil estamos de enhorabuena, pues ha llegado uno de esos juegos que nos mantendrán comprobando nuestro teléfono periódicamente a lo largo de todo el día: Magikarp Jump. Este título cuenta con una jugabilidad simple, un diseño muy bonito y una divertida historia que te mantendrá enganchado, al menos un tiempo.
Jugando a las carpas
La jugabilidad del juego, aunque simple, nos mantendrá enganchados, y es sorprendentemente adictiva. Nada más iniciar la aplicación, tras las típicas comprobaciones que son menester, empezaremos con la intro, donde el alcalde Don Karpio nos presentará el pueblo y el objetivo principal del juego: críar magikarps como si no hubiese un mañana para participar en competiciones de salto. Tras esta breve presentación, nos presentará a Juan Zuelo (AVISO: este juego contiene trazas de humor barato hasta límites insospechados), que nos dará una caña vieja con la que capturaremos al primero de una larga prole de carpas saltarinas que competirán entre ellas por trofeos en ligas. Tras esta presentación, nos sueltan al bicho en un vivero y empezamos a jugar.
Como en cualquier juego de Pokémon, nuestro querido Magikarp tiene niveles, que determinarán su tamaño y lo que salte. Se sube de nivel aumentando los KP (puntos de Magikarp) de tu carpa, bien comiendo bayas, entrenando o en diferentes eventos que van surgiendo a lo largo del juego. Además de Magikarp, nosotros como criadores también tenemos un rango, del cual dependerá el nivel máximo al que nuestro Magikarp puede aspirar. En el vivero, tenemos varias opciones:
Explicado esto, os resumo rápidamente en que consiste el juego: subes al máximo al bicho de turno, lo llevas a la liga, te enfrentas a todos los que puedas hasta que pierdas, subes de nivel como criador, capturas otro magikarp, y así hasta la saciedad. Lo que puede parecer algo tedioso es en realidad horriblemente adictivo, yo ya voy por mi décima carpa, esperando poder derrotar por fin a los cabritos de la tercera liga.
La estética del juego
Lo mejor del juego, que queréis que os diga. Las animaciones son muy bonitas, los eventos son variados y disparatados y los personajes te sacarán más de una sonrisa con su absurdo planteamiento y sus diseños. Los menús están muy cuidados, y lo más importante, a día de hoy aún no he encontrado un solo bug, lo cual es de agradecer. En cuanto a los “combates”, bueno, cumplen su función, y al principio te gustará verlos, pero cuando lleves un tiempo jugando, acabarás omitiendo todos los combates, entrenamientos y eventos repetidos. En cuanto a su música, es muy bonita y acompaña muy bien, aunque la escasez de pistas acabará provocando que aborrezcas un poco algunas canciones.
¿Cuanto durarás dando saltos?
Bueno, no es Pokémon GO, aunque está bastante claro viendo el título del juego. Hablando de mi caso personal, llevo con el juego 3 días y aún no me he cansado, pero lo más normal será que al poco tiempo de estar jugando te acabes cansando, pues es lo que ocurre con la gran mayoría de juegos móviles de estas características. Para alargar un poco la duración, hay un tablón en el que poder enfrentarte a tus amigos a través de Facebook, aunque no creo que eso alargue mucho la duración de este título.
Conclusión
Poco más se le puede pedir a un juego de móvil gratuito. Si bien el juego te acabará cansando más pronto que tarde, su original idea y los alocados duelos entre carpas te mantendrán enganchado el tiempo suficiente para que acabes amando esta bonita locura que es Magikarp Jump. La estética es preciosa, el gameplay es muy parecido al de un Tamagotchi, y, repetimos, el juego es gratis, no hace falta que invirtáis dinero, pues en 3 días este humilde servidor ha conseguido farmear muchísimos diamantes simplemente con lo que el juego te da.
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Jugando a las carpas
La jugabilidad del juego, aunque simple, nos mantendrá enganchados, y es sorprendentemente adictiva. Nada más iniciar la aplicación, tras las típicas comprobaciones que son menester, empezaremos con la intro, donde el alcalde Don Karpio nos presentará el pueblo y el objetivo principal del juego: críar magikarps como si no hubiese un mañana para participar en competiciones de salto. Tras esta breve presentación, nos presentará a Juan Zuelo (AVISO: este juego contiene trazas de humor barato hasta límites insospechados), que nos dará una caña vieja con la que capturaremos al primero de una larga prole de carpas saltarinas que competirán entre ellas por trofeos en ligas. Tras esta presentación, nos sueltan al bicho en un vivero y empezamos a jugar.
Como en cualquier juego de Pokémon, nuestro querido Magikarp tiene niveles, que determinarán su tamaño y lo que salte. Se sube de nivel aumentando los KP (puntos de Magikarp) de tu carpa, bien comiendo bayas, entrenando o en diferentes eventos que van surgiendo a lo largo del juego. Además de Magikarp, nosotros como criadores también tenemos un rango, del cual dependerá el nivel máximo al que nuestro Magikarp puede aspirar. En el vivero, tenemos varias opciones:
- Villa: aquí es donde están las tiendas de objetos, unos se compran con oro (que te dan dentro del juego con eventos o con victorias en las ligas) y otros con diamantes (también te los dan en el juego, cuando subes de nivel, cumpliendo diferentes objetivos o en eventos, pero es la moneda que se consigue con microtransacciones). Por último, está el registro, donde está el Hall de la Fama, los patrones de magikarp que has capturado (blanco y rojo, con franjas blancas, etc…), los diferentes eventos que has desbloqueado y los datos de tus magikarp.
- Bayas: diferentes tipos de bayas irán apareciendo en el agua, que puedes comer para subir tus KP. Cada baya da una cantidad diferente de KP, y cuanto vayas subiendo nivel de criador, podrás desbloquear nuevos tipos en la tienda.
- Entrenar: tienes tres puntos de entrenamiento, que irás gastando con cada uno. Subiendo de nivel se pueden desbloquear nuevos entrenamientos en la tienda, y los más nuevos te darán más KP que los viejos, que pueden subirse de nivel en la tienda. Tras cada entrenamiento, hay una posibilidad de que salte un evento, en el cual puedes desde conseguir oro hasta provocar la muerte de tu querido compañero, así que ojo con esto.
- Decoración: se puede decorar el vivero con diferentes objetos, el primero de ello gratis, el resto previo pago de diamantes en la tienda.
- Compañeros: en el vivero, además de magikarps, puede haber otros Pokémon, que bien son amigos de tu carpa (se desbloquean ganando ligas, por ejemplo Pikachu da experiencia a tu Magikarp) o bien aparecen allí de manera aleatoria (Manaphy dará cantidades ingentes de fruta, y Feebas te da experiencia gratis). Los amigos de tu magikarp pueden mejorarse con pokécaramelos en la tienda, para mejorar sus habilidades.
- Liga: el lugar donde te enfrentarás a otros criadores, compitiendo con los magikarp dando saltos, a ver quien llega más alto. Si tu magikarp es derrotado, será retirado y tendrás que capturar uno nuevo y criarlo desde el principio (no os agobíeis, se tarda nada en subir a los magikarp, cada nuevo pescado consigue la experiencia un 10% más fácil que su anterior), pero el objetivo es que tu carpa llegue a la final, derrote al campeón y se alce triunfante como campeón de las diferentes ligas.
Explicado esto, os resumo rápidamente en que consiste el juego: subes al máximo al bicho de turno, lo llevas a la liga, te enfrentas a todos los que puedas hasta que pierdas, subes de nivel como criador, capturas otro magikarp, y así hasta la saciedad. Lo que puede parecer algo tedioso es en realidad horriblemente adictivo, yo ya voy por mi décima carpa, esperando poder derrotar por fin a los cabritos de la tercera liga.
La estética del juego
Lo mejor del juego, que queréis que os diga. Las animaciones son muy bonitas, los eventos son variados y disparatados y los personajes te sacarán más de una sonrisa con su absurdo planteamiento y sus diseños. Los menús están muy cuidados, y lo más importante, a día de hoy aún no he encontrado un solo bug, lo cual es de agradecer. En cuanto a los “combates”, bueno, cumplen su función, y al principio te gustará verlos, pero cuando lleves un tiempo jugando, acabarás omitiendo todos los combates, entrenamientos y eventos repetidos. En cuanto a su música, es muy bonita y acompaña muy bien, aunque la escasez de pistas acabará provocando que aborrezcas un poco algunas canciones.
¿Cuanto durarás dando saltos?
Bueno, no es Pokémon GO, aunque está bastante claro viendo el título del juego. Hablando de mi caso personal, llevo con el juego 3 días y aún no me he cansado, pero lo más normal será que al poco tiempo de estar jugando te acabes cansando, pues es lo que ocurre con la gran mayoría de juegos móviles de estas características. Para alargar un poco la duración, hay un tablón en el que poder enfrentarte a tus amigos a través de Facebook, aunque no creo que eso alargue mucho la duración de este título.
Conclusión
Poco más se le puede pedir a un juego de móvil gratuito. Si bien el juego te acabará cansando más pronto que tarde, su original idea y los alocados duelos entre carpas te mantendrán enganchado el tiempo suficiente para que acabes amando esta bonita locura que es Magikarp Jump. La estética es preciosa, el gameplay es muy parecido al de un Tamagotchi, y, repetimos, el juego es gratis, no hace falta que invirtáis dinero, pues en 3 días este humilde servidor ha conseguido farmear muchísimos diamantes simplemente con lo que el juego te da.
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