Con la llegada del coche autónomo habría que revisar el papel de las compañías aseguradoras puesto que la responsabilidad ante un accidente no debería recaer en el propietario sino en el fabricante.
Los coches autónomos están cada día más cerca de nosotros, fabricantes que nunca antes habían hecho un coche coquetean con la idea de presentar algo revolucionario, fabricantes que nunca antes habían hecho un coche han demostrado que van por delante de los que llevan años comandando el sector, incluso con mentiras. Pero la pregunta del millón es y será: ¿y si tengo un accidente quién tiene la culpa?
Hace unos días el presidente de Volvo, Hokan Samuelsson, afirmaba con rotundidad que los coches autónomos de Volvo serán 100% responsables de un accidente cuando circulen en modo autónomo. Una sentencia que levantó numerosas críticas porque aludía a resolver cuanto antes las dudas sobre la responsabilidad legal y que se comenzase a legislar a favor del futuro, a favor del coche autónomo.
Es más, su frase más destacada a mi parecer fue Si hemos cometido un error en el diseño del software no es razonable poner la responsabilidad en el cliente. Y esto a mi me plantea una pregunta: ¿qué demonios pintan las compañías aseguradoras en este escenario? Si la responsabilidad de un accidente en un coche autónomo es del fabricante del vehículo, el propietario no necesitaría un seguro tal y como lo conocemos ahora, puesto que no lo va a conducir.
¿Las compañías aseguradoras tendrán sentido con el coche autónomo?
¿Tendrían que pagar los fabricantes un seguro universal ante accidentes? ¿Cargaría el cliente final con este coste o debe ser asumido por la marca? En mi opinión, debemos mirar al coche autónomo como al tren , yo como pasajero no necesito ningún tipo de seguro para montarme en uno y los coches autónomos tendrían un tratamiento similar. En caso de accidente la responsabilidad desde luego no debería ser de uno de los ocupantes puesto que no tiene poder de reacción ante una colisión sino controla el coche, porque, recordemos, se le permite estar realizando otras tareas y no prestar atención a la carretera.
La llegada del coche autónomo será apasionante, pero los resquicios legales pueden acabar con el vehículo autónomo antes de que lo veamos, por lo que las palabras de Hokan Samuelsson tienen sentido para abrir el debate legal cuanto antes. Algo está claro, el papel de las compañías aseguradoras está en juego, cambiará para siempre.
Continúar leyendo...