
En Pac-Man hay dos tipos de jugador: los que empiezan la partida escapando de los fantasmas de colores de manera desesperada y aquellos que ya saben lo que está a punto de hacer cada uno de ellos. En conjunto y por separado, e incluso antes de que se monte el laberinto en pantalla. Desde hoy tú vas a pertenecer oficialmente al segundo grupo... ¡Y en tiempo récord!
Como habrás visto en incontables ocasiones hay cuatro fantasmas en Pac-Man y cuando se juntan forman el Ghost Gang, pero es por separado cuando son más peligrosos. ¿Impredecibles? Más bien todo lo contrario: tal y como afirmó el propio Toru Iwatani, el creador del juego, en una entrevista, lo que ocurre es al Comecocos de Namco lo controlamos nosotros, pero a cada fantasma se le ha dado su propia personalidad.
¿Qué significa esto? A diferencia de otros videojuegos de la época en los que los enemigos tienen trayectorias establecidas de antemano, independientemente de lo que haga el jugador, el juego lanzado en 1980 le dio a cada fantasma una inteligencia artificial, de modo que Blinky (Shadow, el de color rojo), Pinky (Speedy, el rosa), Inky (Bashful, el azul) y Clyde (Pockey, el naranja) reaccionan al juego y lo que hacemos en él, pero cada uno lo hace de manera distinta.
- Shadow persigue a Pac-Man constantemente, usando un algoritmo de seguimiento directo.
- Speedy es muy rápido, pero se mueve de forma más o menos caprichosa: calcula su próximo movimiento cuatro pasos antes de darlo
- Bashful es tímido al principio y escapa de Pacman todo el tiempo, pero si Pacman se acerca demasiado, entonces deja de ser tímido y comienza a perseguirlo y, además se une a la persecución de Shadow.
- Pokey, sin embargo, es lento y se mueve de forma aleatoria. De modo que su velocidad es lo que lo hace "predecible" de un modo diferente al resto.
Estas ideas programadas se diseñaron para que los fantasmas de Pac-Man no fuesen simplemente enemigos genéricos, sino que tuviesen una auténtica personalidad distinguible del resto. Algo muy intencionado por parte de Iwatani.
"Cada uno de los cuatro fantasmas siguió una estrategia diferente al perseguir a Pac-Man. Uno lo siguió, otro intentó interceptarlo tomando rutas alternativas a través del laberinto, otro se quedó cerca del centro del laberinto, y el cuarto... simplemente deambuló...
Por cierto, ¿sabías que cada uno de estos fantasmas tiene su propia personalidad? Sí. Presta atención y notarás que el fantasma rojo es un poco más rápido que los demás, el azul tiende a deambular un poco, el rosa tiende a tenderte emboscadas y el naranja es el típico fantasma lento. ¡La IA de este juego me sigue impresionando!"
¿Una estrategia invencible por parte del Ghost Gang? De hecho, el hecho de que tengan una personalidad propia habilita que haya una esquina en el laberinto a la que si accedemos cuando no estamos en la mira de ninguno de los fantasmas podamos quedarnos de manera indefinida. Un viejo truco que los veteranos conocen bien y les sirve para descansar un rato hasta llegar al nivel 256, el último del juego antes de glichearse.
En VidaExtra | De Pac-man a Tekken 7: el legado de Nakamura en los 62 años de Namco
-
La noticia Cuando la IA empezó a asustar: el secreto detrás de los fantasmas de Pac-Man fue publicada originalmente en Vida Extra por Frankie MB .
Continúar leyendo...