La plataforma de software DroneDeploy ha lanzado en versión beta un nuevo servicio: Fieldscanner. Está orientado para las tareas agrícolas, incluyendo el mapeo en tiempo real.
El nuevo software permite generar mapas en tiempo real, para así poder tomar decisiones en ese mismo momento, si perder tiempo. El agricultor puede caminar hasta las zonas que quiere revisar con sus propios ojos. DroneDeploy señala que la nueva aplicación responde a una demanda que hacían sus usuarios, de tener herramientas para hacer el mapeo en tiempo real.
Lo más cómodo de Fieldscanner es que no se requiere un ordenador ni conexión a Internet. Los mapas se visualizan en una tableta y los datos se transmiten por un protocolo inalámbrico de corto alcance.
Como es habitual, la herramienta tiene como objetivo optimizar los costes de la agricultura. Todo lo que está relacionado con los cultivos y su mantenimiento, a día de hoy es posible ajustarlo con ayuda de una mayor cantidad de información. Para esto se emplean los drones -así como sensores terrestres y de diferentes tipos-, mientras que el procesamiento de los datos corre a cargo de las aplicaciones de software.
Es precisamente esta fase de análisis la más determinante. Y aquí es donde entran en juego dos aspectos. El primero de ellos es el sistema que se ocupa de ordenar la información y de cruzarla para obtener conclusiones relevantes. El segundo aspecto es más sencillo y solo se trata de la interfaz con la que tiene que arreglárselas el agricultor para entender la información que le llega masticada.
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El nuevo software permite generar mapas en tiempo real, para así poder tomar decisiones en ese mismo momento, si perder tiempo. El agricultor puede caminar hasta las zonas que quiere revisar con sus propios ojos. DroneDeploy señala que la nueva aplicación responde a una demanda que hacían sus usuarios, de tener herramientas para hacer el mapeo en tiempo real.
Lo más cómodo de Fieldscanner es que no se requiere un ordenador ni conexión a Internet. Los mapas se visualizan en una tableta y los datos se transmiten por un protocolo inalámbrico de corto alcance.
Como es habitual, la herramienta tiene como objetivo optimizar los costes de la agricultura. Todo lo que está relacionado con los cultivos y su mantenimiento, a día de hoy es posible ajustarlo con ayuda de una mayor cantidad de información. Para esto se emplean los drones -así como sensores terrestres y de diferentes tipos-, mientras que el procesamiento de los datos corre a cargo de las aplicaciones de software.
Es precisamente esta fase de análisis la más determinante. Y aquí es donde entran en juego dos aspectos. El primero de ellos es el sistema que se ocupa de ordenar la información y de cruzarla para obtener conclusiones relevantes. El segundo aspecto es más sencillo y solo se trata de la interfaz con la que tiene que arreglárselas el agricultor para entender la información que le llega masticada.
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