Todos tenemos claro que la mente del Joker es una de las más perturbadas del mundo de la ficción y en el universo de DC son muy conscientes de esta problemática. El archienemigo de Batman no para de dar quebraderos de cabeza y no se le conoce otra faceta mucho más calmada.
Sin embargo, durante los acontecimientos de JLA #15, el genial Grant Morrison ideó una trama en la que la Liga de la Justicia debe recuperar un artefacto llamado la Piedra Filosofal de las manos del payaso asesino. Este objeto tiene la inusual capacidad de alterar la realidad, pero en sus manos lo convierte en un verdadero agente del caos.
Tanto es así que proyecta una sonrisa gigantesca sobre el océano Atlántico, por lo que el Detective Marciano decide tomar medidas drásticas contra el villano. Mediante su telepatía, consigue configurar de forma diferente la información que llega hasta su cerebro, por lo que le hace recuperar la cordura durante unos instantes. En ese tiempo, la violencia inherente al Joker desaparece y comienza a reflexionar asustado sobre todo el mal que ha provocado.
En este estado, el grupo y Lex Luthor consiguen convencerle de que debe usar la Piedra Filosofal para resucitar a todas las víctimas que fallecieron en el ataque a Star City al inicio de la aventura. Joker acepta y Flash le arrebata la dichosa piedra de las manos para que no pueda volver a utilizarla, pero el Detective Marciano no puede sostener durante más tiempo un orden pacífico en su mente.
Él mismo asegura que el cerebro del Joker es como una continua tormenta, por lo que no puede hacer nada más, y finalmente la locura regresa al malvado criminal de Gotham City.
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La noticia El día en el que el Joker recuperó la cordura y no podía creer las locuras que había cometido fue publicada originalmente en Vida Extra por Juan Sanmartín .
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