Noticia El Ford Edge estrenará la nueva y tecnológica dirección adaptativa

ford-edge-2016.jpeg



El Ford Edge será el encargado de estrenar la nueva dirección adaptativa que ha desarrollado el fabricante para mejorar la experiencia de conducción.


A finales de este mismo año Ford lanzará su Edge para luchar en el segmento de los SUVs grandes, un mercado muy competido y que aspira a hacer más tecnológico con la llegada de una dirección que hasta ahora estaba destinada a vehículos con aspiraciones deportivas: la dirección adaptativa.

Este tipo de dirección permite al conductor maniobrar con más facilidad al circular a baja velocidad, por ejemplo una ciudad, pero que a altas velocidades la conducción se vuelva más divertida y ágil. Esto, que puede parecer solo útil en coches deportivos que en ciudad es complicado manejarlos, toma una gran importancia en vehículos tan grandes, como el Ford Edge, para que en ciudad no parezcan muy torpes.

Esta dirección estará en el equipamiento de serie del Edge Sport y opcional para el Edge Titanium.

La dirección adaptativa es capaz de cambiar la relación entre las acciones del conductor en el volante (el número de vueltas) y cuanto giran las ruedas delanteras. De forma habitual, la relación entre lo que el conductor gira el volante y lo que hacen las ruedas es independiente de la velocidad a la que se circula.

En el nuevo Edge la dirección adaptativa permite que en ciudad se necesite girar menos el volante para maniobrar en espacios reducidos, algo que repercute directamente en la comodidad. En autovías y autopistas el coche necesitará un poco más de volante para girar y así el conductor tiene mucha más información y sensibilidad a la hora de afrontar curvas.


Este sistema ha sido creado con la colaboración de ingenieros del TKAG, un proveedor alemán de automoción, y su mayor novedad radica en cómo actúa el sistema. De forma habitual es necesario cambiar la dirección por completo para equiparlo, lo que repercute en unos costes de desarrollo muy elevados y en posibles averías muy costosas. En Ford han conseguido que con solo un actuador de precisión colocado en el volante sea suficiente. Este actuador es un sistema de motor y engranajes eléctricos esencial para añadir o restar vueltas a la dirección.

La dirección adaptativa se irá incorporando paulatinamente al resto de la gama Ford y Lincoln en los próximos años. En Europa la estrenará el Edge y posteriormente llegará a la gama S-Max y Galaxy.

m8gGfLbJ340


Continúar leyendo...