De todas las secuencias y momentos que se han llegado a ver en el universo de Star Wars, son muchos los que coinciden en que la más escalofriante de todas ellas se encuentra en el Episodio III, es decir, La Venganza de los Sith. Exactamente, en el momento en el que un joven padawan se acerca a Anakin Skywalker en el interior del templo jedi. A pesar de tener una cara de pocos amigos, el pequeño pregunta: "Maestro Skywalker, ellos son muy numerosos, ¿qué podemos hacer?".
Justo a continuación, Anakin saca su sable láser y ahí se acaba todo, dejando vía libre a la imaginación de cada uno sobre lo que sucede después, aunque es más que evidente. Los joven padawan pasaron a mejor vida, entre ellos este niño llamado Sors Bandeam, quien fue interpretado por el jovencísimo actor Ross Beadman, a quien le pagaron una auténtica miseria por este papel que desempeñó casi por casualidad y sin hacer castings.
Fue él mismo el que publicó un vídeo en su propia cuenta de Instagram, con motivo del 20 aniversario de este largometraje, en el que contó cómo vivió esta experiencia. Según explicó, su madre disponía de los contactos oportunos, entre ellos alguien que había estrenado su propia agencia de casting. Por carambolas del destino, le preguntaron si a su hijo le gustaría interpretar un papel muy simple durante la película.
Como buen fan de la saga, su respuesta fue un rotundo sí. Poco después, fueron a los estudios Shepperton de Londres, donde se grabaron muchas escenas, entre ellas en la que participaron los pequeños padawan, a quienes se les asignó el peinado y cómo iba a ser la secuencia en cuestión, pero les mintieron asegurándoles que Anakin era el bueno y el salvador, para que no entraran en pánico y para evitar posibles spoilers.
Lo curioso de ese instante es que el director de casting quiso saber quién se sabía el diálogo y fue Beadman el primero que se ofreció, obteniendo su derecho a exclamar una de las frases más famosas de uno de los instantes más angustiosos de la franquicia. En total, Beadman contó que tardaron cerca de 10 o 15 minutos en grabarlo todo y que tan solo hicieron falta cuatro tomas.
Tal vez por la duración o por aparecer en un instante tan puntual sin más, resulta que Beadman tan solo recibió unas 90 libras que, ajustadas por la inflación, hoy serían alrededor de unos 184 euros. Desde luego, una cantidad ínfima para el potencial de una saga tan importante, pero al menos puede presumir de aparecer en ella con una experiencia simplemente impagable.
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La noticia El pequeño padawan que protagonizó una de las escenas más dramáticas de Star Wars se saltó los castings, y además cobró una miseria fue publicada originalmente en Vida Extra por Sergio Cejas (Beld) .
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