El Audi Quattro Lunar es uno de los candidatos para la competición Google Lunar Xprize, cuyo objetivo es llegar a la Luna, hacer un desplazamiento de al menos 500 metros y tomar fotos y vídeos del satélite.
Tras el CES 2016, que ha sido más que nunca un gran escaparate para automóviles y para presentar las novedades más tecnológicas del sector, con todo lo relacionado con coches eléctricos y autónomos, ahora es el turno de una de las ferias dedicadas más importantes, el Salón del Automóvil de Detroit, donde ya hemos visto novedades de marcas tradicionales. Lo que no esperábamos ver son vehículos pensando en la Luna, y Audi ha sorprendido a todos presentando su apuesta para recorrer nuestro satélite.
Hipertextual.
Hemos estado en la feria y hemos podido verlo, y el coche nos ha sorprendido mucho, porque evidentemente no es lo que te puedes imaginar más allá de los paralelismos que se te puedan ocurrir con Curiosity, el vehículo de exploración de la NASA que está recorriendo Marte tomando fotos y analizando la composición de los materiales. El Audi Lunar Quattro, nombre que hace un guiño a los clásicos de la marca, se ha desarrollado con vistas en el concurso "Google Lunar Xprize", que ofrece 30 millones de dólares para quien consiga hacer aterrizar el vehículo en Marte, se mueva al menos 500 metros y envíe fotos y vídeos en alta definición a la tierra.
El Audi Lunar Quattro se alimenta con un panel solar que cubre su parte superior y que recarga sus baterías de litio. Dado que la velocidad no es una gran necesidad, su velocidad máxima es de 3.6 kilómetros por hora. Sus ruedas giran 360 grados, lo que puede ayudar mucho en situaciones donde pueda encontrar obstáculos y dificultades para avanzar.
En su parte delantera cuenta con cámaras que pueden tomar imágenes en 3D, que dan gran atractivo a la misión, ahora que parece que la realidad virtual va a ser una de las tendencias no sólo de 2016, sino de los próximos años, a nivel empresarial, de ocio y doméstico.
Sin duda, otro de los aspectos más interesantes del Audi Lunar Quattro es la contribución de la impresión 3D a su desarrollo, que ha ayudado con la construcción en aluminio y titanio con cableado interno. Lo mejor, incluso más allá de su composición es que el equipo de desarrollo quiere dotar al vehículo lunar con una impresora 3D que pueda alimentarse de energia solar y crear partes de otros dispositivos allí, que es mucho más fácil que enviarlos.
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