Dicen que la realidad supera a la ficción, pero ni la inteligencia artificial más avanzada (o descompuesta) sería capaz de imaginar lo que se se emitía por la televisión en plena década de los 70s. Y eso, por cierto, incluye la programación infantil. Pero, incluso en esas, lo de Legends of the Super-Heroes es muy complicado de defender. ¡Y eso que el Batman de Adam West estaba involucrado!
En 1979, tan solo un año después de que se estrenase en la gran pantalla Superman: La película, la de Christopher Reeves, a la cadena NBC le dió por emitir dos especiales de televisión titulados Legends of the Super-Heroes, un deplorable programa de variedades de la Liga de la Justicia, perpetrado por Hanna Barbera y que va directo a la lista de las peores prodiciones para la pequeña pantalla basadas en los personajes de DC.
La peor Liga de la Justicia que vimos en la pequeña pantalla
Vaya por delante que, dentro de la calamidad que fue aquello, los fans de los cómics de superhéroes y los tipos con poderes y mallas en general tenían dos grandes reclamos para darle una oportunidad: los actores Adam West y Burt Ward se volvieron a poner los trajes de Batman y Robin respectivamente para Legends of the Super-Heroes tras la icónica serie de televisión y, en el proceso, nos mostraban cómo eran las desafortunadas versiones de The Flash, Linterna Verde o Canario Negro de este rinconcito del multiverso. ¿El resultado? Juzgalo tú mismo.
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Insisto, Legends of the Super-Heroes no era algún tipo de parodia ni tampoco una maquiavélica estrategia de Hannah Barbera para destruir a los grandes personajes de DC Comics aunque en los diálogos se buscase que hubiese humor, convenientemente señalado con rotulador y en negrita de cara a la audiencia gracias a las risas enlatadas. pero, claro, estamos hablando de esa época en la que hasta se hacían nefastos especiales navideños de Star Wars. Y eso nos lleva a otra gran pregunta: ¿de qué iba cada programa?
En cierto modo, Legends of the Super-Heroes vendría a ser tanto la secuela de la serie de Batman de la década de los 60s, al menos de cara al elenco actoral, como una versión Live Action de los dibujos animados de los Super Amigos (Super Friends) con las notables ausencias de Superman y Wonder Woman dado que los derechos de ambos personajes estaban en ese momento en otras manos con la saga cinematográfica de Reeves y la serie de televisión protagonizada por Lynda Carter. Pero, siendo justos, su ausencia no influyó en el resultado .
- El primero de los especiales, llamado The Challenge, se emitió el 18 de enero de 1979 y giraba en torno a la celebración del cumpleaños de Scarlet Cyclone, un héroe veterano creado para la ocasión. Lógicamente, la Legión del Mal (o Legion of Doom) no se iba a quedar de brazos cruzados ante esta fiesta y...bueno, inició un plan para destruir el mundo. Y pese al previsible final, hubo un poquito de todo, incluyendo pistas para encontrar una bomba, la pérdida de los superpoderes de los buenos y humor enlatado.
- Una semana después, el 25 de enero del mismo año, se emitió el igual de malo segundo especial titulado The Roast, en el cual el presentador Ed McMahon lidera esta vez un programa a medio camino entre la comedia de situación y una tertulia. Y ojo, que alguien tuvo la ocurrencia de reemplazar al Acertijo (The Riddler) por el superhéroe afroamericano conocido como Ghetto Man, el cual irradiaba todos los estereotipos habidos y por haber.
Como apunte adicional, el propio Adam West lamentó explícitamente haber participado en este doble especial en su autobiografía. Un proyecto en al que, definitivamente, no ayudó su bajísimo presupuesto, el vestuario de los personajes y sus pobres efectos especiales. Siendo, incluso para los estándares de entonces, una producción extremadamente barata apoyada en el gancho de los propios superhéroes.
Efectos del Chapulín colorado, risas enlatadas y humor de otra época
Además de ofrecernos un vistazo a los contrapuntos del universo televisivo del Batman de Adam West de héroes destacados como Linterna Verde (interpretado por Howard Murphy en ambos especiales) Flash (Rod Haase) o Shazam! / el Capitán Marvel (Garrett Craig) entre varios superhéroes y villanos, para Legends of the Super-Heroes se crearon personajes y se introdujeron secundarios excepcionales en situaciones bastante inesperadas.
Es más, a lo largo de ambos especiales de Legends of the Super-Heroes pudimos ver a Atom encogerse en la pequeña pantalla con unos efectos especiales dignos de Chespirito, a la madre de Hawkman quejarse de que su hijo jamás iba a verla y hasta la malvada Giganta anunció que se casaba. Todo, por supuesto, con esa estética, sonidos y banda sonora de los programas de su tiempo.
De hecho, merece la pena destacar que tanto el cuartel general de la Liga de la Justicia como el lugar en el que se reunía la legión del mal era de manera muy descarada el mismo set y que todas las tomas exteriores se rodaron en el mismo parque. Pero, claro, como comentamos aquellos no eran los mayores problemas de Legends of the Super-Heroes.
¿Lo peor que se a hecho con los personajes de DC Comics en la pequeña pantalla? Bueno, dependiendo de a quién le preguntes. A título personal he visto proyectos mucho más recientes y con más presupuesto basados en superhéroes que me han parecido iguales o peores. Pero está claro que dirigirse a un público infantil no te da licencia para hacer cualquier cosa. Sin embargo, visto con ciertas perspectivas, queda claro que Legends of the Super-Heroes es esa clase de programa que hoy no se podría hacer. Posiblemente ni pidiéndoselo a una Inteligencia Artificial escacharrada.
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La noticia Este show de superhéroes parece el delirio de una IA rota, pero es un reflejo de lo locos que fueron los 70s fue publicada originalmente en Vida Extra por Frankie MB .
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