Uno de los puntos clave de la historia de Jurassic Park es que la fantasía presentada por Michael Crichton parece completamente posible, puesto que la explicación científica que se ofrece parece tener toda la lógica. Los mosquitos conservarían la sangre de los dinosaurios en su interior, lo que conllevaría a extraer su ADN para devolverlos a la vida.
Sin embargo, por mucho que Hammond no haya escatimado en gastos, lo cierto es que cometió un error de base desde el inicio. Es más, su equivocación es tan flagrante que corona el icónico bastón que lleva en todo momento en la película de Steven Spielberg y que muestra un orbe de ámbar con un mosquito dentro.
Tal y como reconoció el entomólogo Joe Conlon a Business Insider, el problema reside en que la especie que muestra la cinta se trata del Toxorhynchites rutilus, la cual no se alimenta de sangre. Por si fuera poco, resulta que es la única que no basa su alimentación en el preciado líquido, pero posee la particularidad de ser el mosquito más grande conocido y tiene mucho sentido.
Seguramente el equipo de producción de Spielberg lo escogió como representativo por su enorme tamaño, ya que sería mucho más fácil mostrarlo en cámara que otras especies más pequeñas. Conlon afirmó que los mosquitos que chupasen la sangre "han existido durante unos 170 millones de años", por lo que esa parte de la teoría de Jurassic Park tiene toda la lógica.
Sin embargo, la conservación del ADN animal durante tantísimo tiempo es una quimera absoluta, por lo que ya puedes esperar sentado a poder visitar un parque temático en el que un Tiranosaurio Rex te reciba en la entrada.
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La noticia La fantasía de Jurassic Park es imposible y el principal responsable lo lleva Hammond en su bastón fue publicada originalmente en Vida Extra por Juan Sanmartín .
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