El pasado 9 de octubre, el gigante de las búsquedas presentó oficialmente su apuesta por el mundo de la telefonía con el Google Pixel 3 y Pixel 3 XL, unos terminales que para muchos son un campo de prueba para la compañía y cuya intención no es convertirse en uno de los gana alta más vendidos del mercado.
El año pasado, los Pixel 2 y Pixel 2 XL nos ofrecían un calidad fotográfica que todavía no ha sido superada por ningún otro fabricante. Sin embargo, la calidad de la pantalla dejaba muchísimo que desear y fue el principal punto negativo de este terminal. Este año, Google ha querido ir sobre seguro y ha apostado por Samsung como proveedor.
A dia de hoy, Samsung es el rey indiscutible del mercado en tecnología OLED a la hora de fabricar pantallas para smartphones ya que la mayoría de fabricantes apuestan por ella en lugar de LG. Sin ir más lejos, este año, Samsung vuelve a ser el único proveedor de pantallas de los nuevos iPhone XS y iPhone XS Max.
Google ha querido ir sobre seguro y según el despiece que ha realizado iFixit, la pantalla del Pixel 3 XL ha sido fabricada por el gigante coreano Samsung en lugar de LG fabricante que el año pasado se encargó de la fabricación de la pantalla del Pixel 2 XL que tan malos resultados ofrecía.
Esta decisión llama especialmente la Atencion debido a que recientemente Alphabet invirtió cerca de 800 millones de dólares en LG Display para mejorar la producción de fabricación de los diferentes tipos de pantalla que pone a disposición de los usuarios la compañía.
En este caso, el refrán “más vale malo conocido que bueno por conocer” no se ha cumplido. Samusng ha demostrado en los últimos años no solo la calidad de sus pantallas, sino también la alta capacidad de fabricación, uno de los requisitos de muchas empresas cómo puede ser Apple, cuya demanda suele ser muy elevada.
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