Es sabido que los fotógrafos tienen una forma especial de ver lo cotidiano. Una sensible forma de transformar los lugares o perpetuar eso que solo dura instantes. Para Bruce Mozert, Silver Springs, un bonito lugar en Florida, Estados Unidos, con una gran afluencia turística y de un esplendor natural, fue el lugar ideal para lo que en su imaginación se despertó al conocer aquel lugar. El encanto de este sitio, para el fotógrafo, no fue ajeno, y es que las aguas cristalinas de los manantiales de Silver Springs fueron convertidos en la locación ideal para las escenas acuáticas, las primeras según se indica, en las que Mozert ponía a lindas chicas y atléticos modelos haciendo vida cotidiana. De esta serie se desprende la imagen de líneas arriba.
Para lograr su cometido, Mazert tuvo que realizar varios trucos, por ejemplo, construir una caja a prueba de agua para guarecer su cámara, así como utilizar, para la imagen de la chica que "asa" pescado, leche condensada para el efecto del humo. Las surreales fotografías de esta sesión datan de 1938.
Fuente: Smithsonian
anterior siguiente
Continúar leyendo...