Algunos pensamos que, el día que no se confunda con tanta normalidad fama y prestigio o verdadero valor, habremos avanzado un poco hacia la justicia en el interés por los galardones cinematográficos. Los Oscar, como todas las estatuillas de cine nacionales, acaban en manos de los cineastas en lo que no es más que una ceremonia de autorreconocimiento, la de una industria que se premia a sí misma; al contrario de lo que ocurre en los festivales internacionales, donde tanto los que participan en concurso como los que integran el jurado que decide quién se lleva el gato al agua provienen de distintos países, con lo que no priman las influencias, los intereses económicos ni la inercia selectiva. Al menos, no como algo definitorio.
2 de cada 3 veces, el Oscar a la Mejor Película ha coincidido con el resultado de los Globos de Oro
Además, pese a que hay que considerar que en Hollywood hay talento de sobra y medios para sacar adelante cualquier película, y que esta gente tendrá algo que decir, su Academia de unos 6.000 miembros la componen trabajadores de la industria de todo tipo, con más de 1.300 actores, y eso no garantiza un criterio fiable para que los ganadores del calvo dorado sean siempre los que más se lo merezcan; y en varias ocasiones, hasta demostraron escaso sentido. Y pese a todo esto, los Oscar, cuya 89ª ceremonia de entrega podremos ver en Movistar+ el próximo 26 de febrero, siguen siendo los premios de cine más deseados junto con los del Festival de Cannes, y desde luego, los más seguidos por el público.
Aunque muchas veces se los puede tachar de previsibles, nunca lo son del todo, siempre hay alguna sorpresa que descabalga las quinielas de los expertos, y en dos de cada tres años, dos de cada tres veces, el Oscar a la Mejor Película ha coincidido con el resultado de los Globos de Oro, más tratándose de los dramas. Empezando por el cine breve pero no menor por ello, de los nominados al Mejor Cortometraje de Ficción, y si nos fijamos en la trayectoria de reconocimientos que lleva, lo lógico y lo esperable sería que se lo llevara Timecode, del español Juanjo Giménez Peña, si bien la arbitrariedad suele cebarse con esta categoría. Igual que con la de Mejor Cortometraje de Animación, en la que Piper, de Alan Barillaro y Marc Sondheimer y Disney con Zootropolis puede que tenga todas las papeletas, y con la de Mejor Cortometraje Documental, que probablemente den a The White Helmets, de Orlando von Einsiedel y Joanna Natasegara, si 4.1 Miles no se lo arrebata.
Passengers.
El Oscar al Mejor Largometraje Documental ha de ser y seguramente será para la necesaria denuncia de Enmienda XIII, obra de Spencer Averick y Ava DuVernay, pero aquí también suele verse cierto capricho en la elección con obras como OJ Made in America ó Life, Animated, que se estrenó en Movistar+ el 15 de febrero. El de Mejores Efectos Visuales habrá de ser para Doctor Strange, filme de Scott Derrickson ó El libro de la selva; el de Mejores Efectos Sonoros, quizá para La llegada, de Dennis Villeneuve; y el de Mejor Sonido, para Hasta el último hombre, de Mel Gibson, si el rodillo de La La Land, de Damien Chazelle, no se lo quita. Con el de Mejor Maquillaje puede que sea distinguida Escuadrón Suicida, de David Ayer; y Animales fantásticos y dónde encontrarlos, de David Yates, con el de Mejor Vestuario por el estupendo trabajo de la gran Coleen Atwood.
Es probable que premien a Isabelle Huppert, Casey Affleck, Viola Davis y Mahershala Ali por sus interpretaciones
Este año está reñido el Oscar al Mejor Diseño de Producción, y podríamos apostar a que lo obtendría Animales fantásticos y dónde encontrarlos, pero Passengers, película de Morten Tyldum, y La La Land o Ave César!, por supuesto, pisan fuerte. El de Mejor Canción ha de ser para esta última, de Demian Chazelle, precisamente por “City of Stars”; como el de Mejor Banda Sonora para Justin Hurwitz. El mexicano Rodrigo Prieto debería irse a casa con el de Mejor Fotografía por Silencio, el último filme de Martin Scorsese; y es probable que La La Land consiga el de Mejor Montaje, si bien a La llegada y Hasta el último hombre no las podemos descartar tampoco.
Barry Jenkins quizá logre el Oscar al Mejor Guion Adaptado por su película Moonlight, pero debería ganarlo Eric Heisserer por el de La llegada; y por absurdo que parezca, hay visos de que Chazelle puede conseguir el de Mejor Guion Original por La La Land y su resultona pirueta final, premio que tendría que ser para Efthymis Filippou y Yorgos Lanthimos por Langosta, dirigida por el segundo. Por su parte, el Oscar a la Mejor Película de Habla No Inglesa es otro de los más arbitrarios, pero las dos nominaciones de la sueca Un hombre llamado Ove, rodada por Hannes Holm, apuntan en su dirección, si bien no deberíamos perder de vista a Toni Erdmann, cuyo remake estadounidense ya está en marcha nada menos con el redivivo Jack Nicholson.
'La La Land' - Summit Entertainment, Gilbert Films, Impostor Pictures, Marc Platt Productions
La La Land sería la gran triunfadora y podría acabar con entre 6 y 8 Oscar de sus 14 nominaciones
Viola Davis posiblemente será reconocida con el Oscar a la Mejor Actriz de Reparto por Fences, aunque Naomi Harris o Michelle Williams podrían pillarnos desprevenidos por Moonlight y Manchester frente al mar respectivamente. Recompensarán Mahershala Ali con el de Mejor Actor de Reparto por su interpretación en la primera, si Michael Shannon no le da un susto por su trabajo en Animales nocturnos. La francesa Isabelle Huppert tendrá el de Mejor Actriz Principal por Elle, el último filme de Paul Verhoeven, si la Emma Stone de La La Land no la desbanca y pese a que debería ganarlo Ruth Negga por Loving. Del mismo modo, Casey Affleck sería el Mejor Actor Principal del año por Manchester frente al mar si el Ryan Gosling de La La Land no le eclipsa sin ningún sentido.
Prácticamente no hay dudas de que Damien Chazelle ganará el Oscar al Mejor Director por esta última, aunque algunos se lo daríamos a Dennis Villeneuve por La llegada. Y el de Mejor Película está cantado: La La Land, que así podría acabar la ceremonia con entre seis y ocho Oscar de las catorce nominaciones con las que ha sido beneficiada. Pero para ver lo que ocurrirá, habrá que sintonizar el canal correspondiente de Movistar+ el día 26 de febrero. Sólo así sabremos si se cumplen los pronósticos o, este año, los premios de la Academia de Hollywood se salen del guion.
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