El séptimo arte se encuentra lleno de figuras que, a causa de su popularidad, se han convertido en una gran referencia para muchos fans. Humphrey Bogart, Steve McQueen o Audrey Hepburn son solo algunos de los personajes que podemos señalar como iconos del cine.
Sin embargo, también existe otra figura que, no solo se convertiría en una leyenda dentro de la gran pantalla, sino que también alcanzaría otras esferas. Estamos hablando de Marilyn Monroe, la actriz que terminó convirtiéndose en el eterno icono sexual de Hollywood.
Como detalla en el Daily Mail la última sesión fotográfica de Marilyn Monroe fue obra de George Barris el 13 de julio 1962, justo tres semanas antes de su muerte. El fotógrafo Bert Stern realizó poco antes otra sesión para la revista Vogue, pero realmente fue George la última persona que contempló a la actriz a través del visor de una cámara.
La última sesión fotográfica de Marilyn Monroe se realizó en una playa de California, y como el propio Barris afirmó en el Daily News, “cuando la vi por primera vez pensé que ella era la persona más hermosa y fantástica que jamás había conocido”.
Sin embargo, la última foto de Marilyn fue dedicada exclusivamente al fotógrafo, “ella se levantó y dijo: ‘esto es sólo para ti, George’, lanzándome un beso”, confiesa el propio autor. Por desgracia, poco tiempo después Marilyn Monroe fallecería a los 36 años por una sobredosis de barbitúricos.
Créditos: George Barris.
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