
La belleza siempre ha sido una cosa subjetiva, lo importante es hacer una miss de algo.
En Europa, era costumbre antigua elegir reyes y reinas simbólicos para las distintas festividades, pero el primer concurso moderno de belleza fue en Estados Unidos. Fue llevado a cabo por P. T. Barnum en 1854 y cancelado por las protestas populares. Sin embargo, ese fue el inicio de toda una era de concursos similares que sí tuvieron acogida. En general, antes los concursos de belleza tenían más público que ahora y se hacían de todo tipo y con cualquier excusa. Gracias a esto, hay un gran arsenal de concursos raros, de los que hemos seleccionado algunos de los más llamativos.
Miss postura correcta

Contestants next to plates of their X-Rays during a chiropractor-judged beauty contest.
En la década de 1950, cuando los quiroprácticos entraron en el campo de la medicina, se enfrentaban a un enorme problema de relaciones públicas. Su oficio era muy raro para el público en general y no los tomaban como expertos en su campo de la ciencia.
Por lo cual, vieron en los concursos de postura una manera de ganar credibilidad en el campo de la medicina. El concurso trataba de dejar que expertos estudiaran tus radiografías y criticaran tu postura de pie. Louis Conway fue coronada la primera «Miss postura correcta» en 1956.
En ese momento, el diario Desierto Noticias, de Salt Lake, Utah, informó sobre las calificaciones de los jueces diciendo: "La mala postura, dicen los expertos, es en gran parte debida a un estado perezoso o alteración del orden de la mente y en nuestro camino suave de la vida". Las ganadoras del concurso obtenían por tanto, a parte de una buena cantidad de dinero en efectivo o una beca, un plus de reconocimiento al inscribirse en las solicitudes universitarias (en aquella época valía todo) y por eso se presentaban.
Miss ojos preciosos

Miss tobillo bonito

Desde 1930 hasta la década de 1950, las competiciones del «tobillo más bonito» eran muy populares tanto en Inglaterra como en Francia. A veces, esta categoría se hacía por su cuenta y otras eran complementarias de un concurso de belleza tradicional. Normalmente eran patrocinados por empresas de zapatos y se regalaban a las ganadoras zapatos y medias como premio. Las participantes se ocultaban detrás de cortinas enseñando sólo sus tobillos y piernas. Un juez luego los examinaba en directo de arriba y abajo, a veces incluso midiéndolos, y así se elegía la ganadora. Supuestamente, la mejor parte de estos concursos era que las mujeres mayores podían entrar en ellos y tenían incluso más probabilidades de ganar porque la edad ayudaba a alcanzar las medidas de ancho más deseadas.
Miss vampiresa

Miss Bella Ape

June 1972: Gary Owens runs Miss Beautiful Ape contest This photo was published in the June 14, 1972 Los Angeles Times.
Algo parecido a lo anterior pasó en el concurso Miss Bella Ape. Fue también una campaña de promoción, en este caso para la película «Conquest of the Planet of the Apes» («La rebelión de los simios» en España).
Las concursantes aparecían en bikini y con máscaras de simios hiperrealistas como cabeza. La ganadora, Dominique Green (concursante número 2), obtuvo un papel en la siguiente película: «Batalla por el planeta de los simios».
Miss Marilyn

Miss NASA

Miss NASA, 1970, NASA Lewis (later renamed NASA Glenn Research Center).
En varios laboratorios de la NASA se llevaban a cabo estos concursos entre 1950 y 1970. Empezaron en el laboratorio “The Jet Propulsion”, que se encontraba en el Centro Espacial Lewis (renombrado a Lewis Research Center años después), en Cleveland, Ohio. Parece que más tarde se fue extendiendo como costumbre y el Centro Espacial Johnson también tuvo sus propias categorías de concursos que iban desde «Miss misil tripulado» o «Miss espacio exterior» a otras como «Princesa del alunizaje». Los concursos no duraron tanto pues, al parecer, solo participaban empleadas de la NASA que estaban obligadas a hacerlo y por su carácter claramente despectivo para un empleado (eran un divertimento para los empleados masculinos), las concursantes no estaban muy de acuerdo.
Miss bomba atómica

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