Antes de conocerla como Rockstar Games, DMA Design fue el nombre que recibió la desarrolladora que se encargó de abrir la puerta a la franquicia GTA. Fue en noviembre de 1997 cuando la primera entrega desembarcó en sistemas MS-DOS y Microsoft Windows, pero los inicios de la saga fueron tremendamente convulsos.
Evidentemente, un videojuego que permitía robar coches y provocar el caos por las calles no parecía lo más adecuado para los pequeños de la casa, por lo que los rumores y el escándalo se propagó con facilidad. David Jones, cocreador de GTA, desveló en una entrevista con The Times en 2012 que, siendo conscientes del revuelo causado, contrataron a Max Clifford, profesional de relaciones públicas, para que generase expectación acerca de su proyecto.
El debate había escalado hasta las más altas instancias, pues se habló del videojuego en la Cámara de los Lores. "¿Es cierto, como se ha informado, que ese juego incluye robos de coches, conducción temeraria, atropellos y fugas, y persecuciones policiales, y que no habrá nada que impida que los niños lo compren?", se preguntaba Lord Campbell de Croy en aquellos tiempos. Por supuesto, la prensa sensacionalista como el Daily Mail también se encargó de crear titulares amarillistas.
"Solíamos pensar que los políticos eran idiotas. Quejarse de un juego que el 99% de ellos nunca habrían visto. Llamarlo un simulador de asesinatos solo demostraba lo ignorantes que eran, y lo sabíamos", aseguraba Mike Dailly, otro de los padres de GTA. Teniendo en cuenta la controversia, Clifford se puso manos a la obra para mantener la polémica en auge y que no se parase de hablar de la producción.
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"Max Clifford hizo que todo sucediera. Él diseñó toda la polémica, lo cual prácticamente garantizó que los parlamentarios se involucraran", señaló Dailly sobre una estrategia que funcionó con el paso del tiempo. Circuló una historia antes del lanzamiento del juego de que miles de copias habían sido robadas de un almacén. "Haría cualquier cosa para mantener el perfil alto", indicó Dailly.
Poco a poco, GTA comenzó a verse como un objeto de deseo prohibido, lo cual resultó en que en el Reino Unido vendiese medio millón de copias en Navidad. En el resto del mundo, un millón más, por lo que la jugada no pudo salir más redonda.
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La noticia "Los políticos eran idiotas": Rockstar ideó una jugada maestra y pagó para que GTA recibiese mala prensa fue publicada originalmente en Vida Extra por Juan Sanmartín .
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