¡Hasta los multiversos de los cómics tienen límites! Y eso que los héroes mueren y resucitan más veces que Jean Grey y los crossovers se multiplican como clones de Doomsday. Sin embargo, incluso la propia Marvel, la que derribó tantos tabús en la historia del noveno arte, le tuvo que parar los pies a Grant Morrison antes de que cometiese un par de atrocidades. En nombre del mercenario bocazas, eso sí.
Que conste que esto estaba en nuestras quinielas: Morrison es un guionista que ha hecho del exceso su marca registrada, de modo que su elección para el nuevo crossover de Marvel y DC con una historia para Batman/Deadpool siempre tuvo un atractivo especial. ¿Se lograron las expectativas? La versión corta es que se superó a sí mismo, incluso cuando él mismo reveló que dos chistes fueron tachados del guion por petición directa de los de arriba. Más concretamente, de los que aprueban cada grosería perpetrada por Deadpool desde el papel.
Sí, el mercenario bocazas, maestro del meta-humor y de romper la cuarta pared, se quedó sin dos punchlines que prometían ser tan explosivos como una granada de Harley Quinn. ¿Eran buenos?
Aviso sobre detalles (menores) del cómic Batman/Deadpool publicado por DC
La anécdota, contada en su boletín Back to Bat, es casi un gag en sí misma: Morrison lo narra con sorna, como si se tratara de un panel perdido en el que Wade Wilson se queda mirando al lector y dice: "¿En serio? ¿Ni siquiera puedo hacer ese chiste?". El resultado: dos bromas que nunca vieron la luz, guardadas en la bóveda editorial como si fueran villanos derrotados antes de aparecer en escena. ¿Y cuales eran esos chistes?
Uno de los dos chistes en cuestión, según el guionista, se arregló cambiando un simple diálogo. En un momento dado en el cómic los dos protagonistas están luchando contra unos personajes animados y Deadpool usa su pistola de telarañas. En la versión final, al disparar, el personaje de Marvel dijo "Death by happy ending", que se traduce como "muerte por final feliz". Las palabras que Morrison quería usar eran mucho más explícitas.
"¡La pistola de telarañas tiene su gran momento! La frase original era "¡Tengo una pistola de eyaculación!", pero Marvel la canceló. Mi frase de reemplazo me parece peor".
¿Y qué pasa con el segundo? Bueno, en una publicación anterior de Morrison admitió que, cuando se estaban planteado las portadas alternativas, se hiciese un homenaje al mítico cómic en el que Superman se enfrenta a Muhammad Ali. ¿Qué tiene eso de malo? Bueno, no había nada problemático con el dibujo, pero si con la idea completa: nada de temas religiosos.
Se me ocurrieron dos ideas: para la de Dan Mora, sugerí que Batman y Deadpool hicieran de Superman contra Muhammad Ali, luchando ante una multitud entusiasta de ángeles que lo vitoreaban.
La idea debía ser una sinopsis en la portada que dijera "¡BATGOD contra MARVEL JESÚS!", hasta que nos dijeran que Dios y Jesús estaban fuera de los límites.
Que Morrison describa la decisión de retirar estos dos chistes como "demasiado Marvel para Marvel" es algo bastante peculiar. Sobre toco cuando,en cierto modo, jugaban con la propia identidad de la editorial y con la percepción que los lectores tienen de sus héroes. Visto con perspectiva, eran bromas que no solo se reían de Deadpool, sino de la maquinaria que lo sostiene. Y ahí es donde la Casa de las Ideas dijo que por ahí no pasaban.
Con todo, y pese a que la propia Marvel mandó al Bat-sótano estas ideas (que sepamos), el cómic crossover publicado por DC es exactamente lo que se espera de esta alineación imposible de titanes del cómic de superhéroes. Y, siendo sinceros, la historia del polémico e irreverente Grant Morrison es la coronación total de Batman/Deadpool.
¿Las censuras son un acierto o un error? Bueno, Marvel puso la tirita antes de la herida. La otra realidad es que estos dos chistes prohibidos de Batman/Deadpool son como viñetas invisibles: sabemos que existieron, pero probablemente nunca los veremos impresos. De modo que Morrison los convierte en parte de la mitología del cómic, en esos "What if...?" que alimentan la imaginación de los fans. Un Deadpool con un chiste sin remate, se convierte en el gag más grande de todos: el gag que nunca se contó. Porque en el mundo del cómic, incluso los silencios tienen bocadillo.
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La noticia ¡Marvel censuró Batman/Deadpool! Estos son los dos chistes del crossover que acabaron en el Bat-sótano fue publicada originalmente en Vida Extra por Frankie MB .
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