Mobincube, la plataforma española que nos permite desarrollar aplicaciones móviles sin necesidad de saber programar, se ha aliado con la estadounidense moBack con la idea de aumentar sus opciones de diseño.
Tener a nuestra disposición una plataforma fácil e intuitiva para poder diseñar aplicaciones móviles sin tener ningún conocimiento sobre programación fue uno de los logros que consiguió Mobincube hace ya algún tiempo, una plataforma propiedad de la empresa valenciana Mobimento Mobile.
Ya se habló de los logros de esta startup cuando en 2014 consiguió 1,1 millones de euros de financiación con un objetivo muy claro y definido: llegar a Estados Unidos y establecerse en Silicon Valley. Y con solo un año de diferencia lo han conseguido.
Mobincube, que ya cuenta con 40 millones de descargas en dos años y que según datos de la empresa son capaces de generar beneficios de hasta 12.000 euros al mes a algunos de sus usuarios que sin apenas coste diseñaron su App, acaba de anunciar que se ha aliado con una empresa establecida en Silicon Valley moBack, la cual ofrece un sistema de programación en la nube.
¿Y en qué beneficiará a los usuarios este acuerdo? Los más de 650.000 registrados tendrán la oportunidad de aumentar sus opciones manteniendo la simplificación del proceso de diseño de sus aplicaciones. Es decir, lo que propone moBack es un servicio de backend para que los desarrolladores generen sus aplicaciones vinculando la programación a la nube o al servidor de la plataforma, olvidándose de desarrollar código dentro de un servidor. En otras palabras, se da la posibilidad de realizar tareas mucho más complejas con los datos pero sin tener que romperse mucho la cabeza, llevando mucho más lejos las posibilidades que Mobincube tenía en un principio. Se añade, por ejemplo, la posibilidad de gestionar datos, autenticación de usuarios, notificaciones personalizables... y así un largo etcétera.
De forma paralela, los usuarios de moBack también podrán acceder a la plataforma de Mobincube y a su interfaz puramente visual, con lo que se cumple el deseo de la startup valenciana de instalarse en Estados Unidos.
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