La capital de Chile, reconocida por ser una de las ciudades con mejor calidad de vida en América Latina, ha sido declarada en estado de preemergencia ambiental debido a las malas condiciones de su aire. Una gran nube de polución cubre la metrópoli, de la cual únicamente escapan los rascacielos como la Gran Torre Santiago
Las principal razón de su paupérrima situación ambiental se encuentra en su posición demográfica. Santiago de Chile está rodeada de cordilleras montañosas de gran altitud, algo que dificulta la libre circulación del aire y perjudica a la capacidad para renovar las partículas que se respiran en la ciudad. Asimismo, esta situación todavía se empeora en verano, donde no llueve y aún existen menos corrientes.
Como informan desde la BBC, esta es la peor alerta medioambiental desde hace 16 años. Según el propio gobierno, "Actualmente enfrentamos condiciones inusuales, con uno de los meses de junio más secos en más de 40 años y a lo que se suman las malas condiciones de ventilación que se han registrado en la cuenca de Santiago en los últimos días, lo que incrementa las concentraciones de contaminantes".
Por ello, se han intentado tomar algunas medidas con vistas a mejorar la calidad del aire y reducir la nube de polución. Así, se prohibió la circulación de aquellos vehículos más contaminantes y paralizaron las actividades de unas 3.000 industrias.
Créditos: Ueslei Marcelino | Reuters
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