He jugado a los suficientes videojuegos a lo largo de mi vida para haber visto sistemas de progresión de todos los tipos y colores, especialmente cuando se trata de videojuegos con elementos RPG o cualquier tipo dentro del género como MMORPG o ARPG. Uno de mis favoritos es el S.P.E.C.I.A.L de Fallout 4, que se gestiona mediante un menú que simula un póster de todas las habilidad y cada una está representada por vault-boy.
Diablo IV tiene otro de los árboles de habilidades que más me gustan en términos de diseño, ya que empieza siendo un muro de habilidades ramificadas y acaba convertido en un enorme sistema de puntos repartidos en tableros que pueden girarse antes de iniciarlos. Y creía que era una de las mecas de lo complejo y profundo, pero fue porque nunca había jugado a Path of Exile.
Path of Exile 2 y su árbol de pasivas
Nunca he jugado a Path of Exile y no tenía intención de empezar en Path of Exile 2, pero la vida te acaba llevando por caminos que no creías que transitarías. Ha sido más que una probadita, concretamente 24 horas en el primer fin de semana y casi 50 en lo que llevamos desde entonces. Y no ha sido más porque el día tiene horas limitadas y uno tiene ya una edad en la que dormir empieza a no ser una opción.
Me han gustado muchas cosas. Otras no tanto. Pero lo que realmente me tiene fascinado, impresionado, sobrepasado y un poco delulu, como diría Alegría de Inside Out, es el árbol de pasivas de Path of Exile 2. Entiendo que los fans de este universo lo veáis como algo normal, pero para alguien que nunca lo había visto es todo un descubrimiento. Y más para alguien que no solo es impresionable, sino que disfruta con el descubrimiento en sí mismo.
Si lo has visto, sabes de lo que hablo. Si no lo has visto, echa un vistazo a la réplica que han creado en la web de Maxroll para hacerte a la idea de por qué le estoy dedicando un artículo entero. Cada puntito que ves en la imagen es una habilidad pasiva que forma parte de una red enorme de habilidades pasivas de todo tipo. Si bien parecen distinguirse algunas autovías, lo cierto es que la mayoría del tiempo avanzar es como andar por carreteras secundarias.
En Vida Extra
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Un par de veteranos de Path of Exile me concedieron unas horas de su tiempo para explicarme cómo funciona. Si bien no es tan complicado como aparenta, lo cierto es que tiene su miga y leérselo todo lleva un tiempo considerable. No porque cada habilidad tenga mucho texto, sino porque no está precisamente ordenado para una lectura lineal. Son caminos muy enrevesados. El árbol está diseñado para que te pierdas y que explorarlo sea parte de la experiencia del juego.
El secreto de este árbol de pasivas es que lo comparten todas las clases, al menos las seis que hay por el momento en el early access o acceso anticipado. Cada una parte desde un punto de la circunferencia central, pero puede avanzar en la dirección que quiera, pudiéndose meter de lleno en las ramas de otras clases si es necesario. Por ejemplo, mi Bruja nigromante ha invadido varias ramas que pertenecen a la subclase de fuego de la Hechicera.
Las posibilidades a la hora de crear clases son muy variadas y lo serán mucho más a medida que se introduzcan cambios. Sin embargo, abrirse camino no es sencillo, porque debes equilibrar dos aspectos: que la ruta te lleve hasta tu objetivo, pero que al mismo tiempo sea óptima para la build que quieres construir. Por eso tanto el juego como esta réplica tienen buscador para encontrar las pasivas que te interesan. En la web puedes repartir los puntos a voluntad y establecer rutas que seguir luego en el juego.
Sé que muchos jugadores acabarán recurriendo a guías para seguir rutas ya establecidas por otros jugadores. Y está bien. En mi caso, este árbol de pasivas se ha convertido en un minijuego dentro del propio Path of Exile 2, algo similar al Stratagem Hero de Helldivers 2. He dedicado algunos ratos libres a explorar rutas y leer todas las habilidades mientras tenía música o un directo de fondo. Lo cierto es que no recuerdo ni la mitad, pero poco a poco he descubierto puntos interesantes para mi Bruja. ¿Cómo voy a llegar hasta ellos? ¡No tengo ni idea!
Estoy seguro de que no estoy solo en este barco. Y aunque encontremos rutas óptimas, se pueden ir al carajo en cualquier momento después de una o varias actualizaciones, especialmente durante la fase early access. Con esto no quiero decir que Path of Exile 2 haga algo unicorniano, pero sí que cuenta con todo mi asombro.
Que asignar las pasivas esté siendo toda una subtrama para mí en la experiencia es algo muy gratificante. ¿Quizás es innecesariamente grande? Es posible. ¿Qué es efecto placebo porque de separar las clases no serían tan grandes? También, pero la cuestión es que está todo conectado. Y quizás eso es lo que me fascina. En cualquier caso, lo estoy disfrutando mucho y estoy seguro de que me va a llevar a la locura más pronto que tarde.
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La noticia Vivo en un cortocircuito permanente desde que empecé mi primera partida en Path of Exile 2. No es por el combate y mucho menos por la historia fue publicada originalmente en Vida Extra por Alberto Martín .
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