Debi Coleman fue partícipe de la expansión de la que hoy es la empresa más valorada del mundo. Apple ya era una empresa puntera en tecnología en los 80. Aunque lo de Coleman no era tanto la tecnología a nivel técnico, como sí los números que hay detrás, lo cual puede ser igual y hasta más relevante. Fue la encargada de gestionar los millonarios presupuestos de los proyectos de Apple y, sabiendo lo poco que a Steve Jobs le importaba despilfarrar en los inicios de la compañía, podemos imaginar que no era fácil.
Debi Coleman, nacida en el estado de Oregon, ni siquiera se veía preparada para semejante puesto en Apple. No dudaba en confesarlo públicamente, aunque el ojo de Steve Jobs para saber a quién contratar estaba afinado y Coleman ha acabado pasando a la historia como una de las gestoras financieras más relevantes en la industria tecnológica.
Experta en números, tuvo su primer gran trabajo en Apple
Debi Coleman habría cumplido 73 años esta semana, ya que nació el 22 de enero de 1952. Sin embargo, falleció el 15 de octubre de 2021 con 69 años. Se desconocen las causas exactas, aunque algunas fuentes señalan que fue "pacíficamente", por lo que se intuye que fue algo repentino y no doloroso.
Poco o nada se sabe de la juventud de Coleman, más allá de que nació en Cumberland, una pequeña ciudad al noreste del estado de Rhode Island, en Estados Unidos. Estudió en la Universidad de Negocios de Stanford, donde se lincenció en dirección de empresas para más tarde graduarse como ingeniera en el Instituto Politécnico de Worcester.
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Y tras trabajar supervisando cuentas en pequeñas empresas, Coleman tuvo que esperar a cumplir los 29 años para obtener su primer puesto de responsabilidad, en una Apple que apenas llevaba cinco años. Fue en 1981 y, pese a ser una joven empresa y no ser ni mucho menos lo que es hoy a nivel de números y prestigio, Apple estaba ya tratando de competir contra gigantes tecnológicos de la época como IBM.
Steve Jobs la reclutó como directora financiera del área de Macintosh. Este era un departamento clave en aquella Apple de los 80, dado que fue el primer gran ordenador comercial de la compañía y que cumplió 40 años el pasado 2024. Para la posteridad quedará también aquel anuncio considerado por muchos expertos como el mejor spot publicitario de la historia.
Y llegó el gran ascenso… para abandonar Apple dos años después
Debi Coleman no tardaría en ganarse el respeto de compañeros y, sobre todo, de sus jefes. Su buen hacer con las cuentas del Macintosh la impulsaron a que en 1986 fuese ascendida a directora financiera de Apple. Todo ello bajo supervisión de John Sculley, quien había ascendido a CEO en 1983 y fue uno de los responsables de que Steve Jobs se marchase de Apple en 1985, un año antes del ascenso de Coleman.
La flamante jefaza de cuentas de Apple acabó siendo clave en importantes operaciones financieras de la compañía y que la acabarían impulsando a ser una de las empresas más reconocidas del mundo. Véase como ejemplo su papel en los acuerdos de Apple con Adobe.
Sin embargo, Debi no duraría mucho en ese puesto. A finales de 1988, casi tres años después de acceder al puesto, optó por renunciar. El mandato de Sculley aún seguía firme, pero los Macintosh no habían logrado el éxito que se esperaba y había quienes dentro de la empresa no acababan de ver que la empresa fuese a terminar bien. Y aunque nunca llegó a reconocerlo, probablemente Coleman fuese una de ellas. Al Eisenstat, que había sido su mano derecha, ocupó el puesto de director financiero.
Regreso a Apple intercambiando los papeles con su vicepresidente
Debi Coleman se marcó un Steve Jobs mucho antes de que se lo marcase el propio Steve Jobs. En julio de 1989, apenas un año y medio después de marcharse, regresó a Apple. Eso sí, no fue un regreso triunfal precisamente.
El nuevo puesto de Coleman podría interpretarse como un paso atrás en su carrera, dado que llegó como vicepresidenta financiera, siendo esta vez ella quien ejerció como ayudante de Al Eisenstat, quien recordamos que había accedido al puesto de máximo mandatario de cuentas tras la marcha de esta un año antes.
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Desde aquel año y hasta 1992, Coleman se mantuvo en ese puesto con relativo éxito. A nivel empresarial no se podía decir que Apple estuviese haciendo bien las cosas y de hecho el puesto de Sculley peligraba. Tanto que este al final tuvo que dimitir y fue reemplazado por Michael Splinder un año después.
No obstante, tanto su primera etapa como la segunda le sirvieron a Coleman para ser catalogada como una de las mejores gestoras de Silicon Valley, prueba de que al final no tuvo responsabilidad en aquel dispendio de dinero y recursos que Apple estaba empezando a ejecutar en aquellos años. Los más oscuros en la historia de la compañía.
Trayectoria tras Apple y máxima ejecutiva de una tecnológica
Tras dejar Apple en aquel citado 92, Debi Coleman no se alejó ni muchísimo menos de los puestos de responsabilidad. Y tampoco de la industria tecnológica, ya que inmediatamente después de salir de las oficinas de Infinite Loop acabó fichando por Tektronix, una empresa especializada en el diseño y desarrollo de osciloscopios y que aún hoy sigue operando.
En Tektronix, Coleman obtuvo el puesto de vicepresidenta de tecnología y materiales, un puesto en el que también le aguardaban responsabilidades financieras. Sin embargo, el futuro que le aguardaba en esta empresa era aún mejor.
En 1994 nació Merix, una escisión de Tektronix de la que Coleman se convirtió en CEO. Fue un puesto que mantendría durante un lustro hasta que en 1999 decidió abandonarlo, aunque no sin dejar su puesto como presidenta de la junta. Este último no lo abandonaría hasta 2001.
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Aparte de trabajar como asesora financiera de multitud de compañías, durante el resto de su trayectoria profesional estuvo dedicada a apoyar las artes escenicas locales de Oregon mediante su propia productora. Tanto es así que fue incluso productora de 'Salto de Fe', un musical que llegó incluso a dar el salto a Broadway en 2012.
Ya retirada de los grandes puestos de responsabilidad y delegando los de su empresa en otros expertos, Coleman dedicó los últimos años de su vida a descansar y disfrutar de su familia. Todo tras una vida llena de altibajos en cuanto a idas y venidas, aunque con un reconocimiento profesional del que pocos pueden presumir. Mucho menos aquellos que estuvieron en la Apple de finales de los 80 y principios de los 90.
Imagen de portada | Montaje con fotografía de CNET
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La noticia Fue una de las grandes gestoras financieras de Silicon Valley y figura clave en la Apple más oscura. Quién fue Debi Coleman fue publicada originalmente en Applesfera por Álvaro García M. .
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