Dentro del género de los FPS podemos encontrarnos con propuestas de todo tipo, pero yo soy de los que le gusta encontrarse con algo que vaya más allá de pegar tiros como si no hubiera un mañana, aunque también disfruto de vez en cuando con títulos en los que predomina el componente cooperativo y tenga que verme las caras contra decenas de criaturas infernales. Eso mismo lo pude vivir hace nueve años con Killing Floor 2 y estos últimos días con la beta de Killing Floor 3.
Tripwire Interactive ha llevado a cabo una fase de pruebas para que los jugadores de todo el mundo tuviesen la oportunidad de descubrir qué se encontrarán dentro de unas semanas cuando esta tercera entrega llegue a las tiendas. En grandes rasgos, me he encontrado con que mantiene la misma esencia con una acción ambientada en el año 2091, en un momento en el que un grupo de soldados especializados, conocidos como Nightfall, deben combatir contra unas bestias monstruosas llamadas Zeds.
Los que ya tengan una larga experiencia en esta serie no se encontrarán con ninguna sorpresa en ese sentido y en su jugabilidad en general. La partida arranca en una base de operaciones desde la que puedes elegir al especialista que quieres controlar, entre seis clases diferentes con sus respectivas armas y habilidades especiales, de manera que hay algunos centrados en el combate cuerpo a cuerpo, a distancia, en colocar trampas, en proteger a los compañeros, en activar artilugios, etc.
Todo lo que sea necesario para erradicar a estas temibles y letales criaturas que están arrasando el mundo. Por lo tanto, el objetivo es desplazarse a los lugares en los que se encuentran y aniquilarlos hasta no dejar ni uno solo en pie. Una tarea de lo más peligrosa que se puede completar en solitario o en compañía de cinco jugadores más, pero lo que es igual para todos es el espectáculo de lo más visceral que se presencia constantemente.
En cada uno de los escenarios la acción transcurre en forma de oleadas. Una vez empieza una, no pararás de escuchar los gritos y los pasos de estas monstruosidades tan espeluznantes desplazándose por todas partes. Estas se dividirán en un número muy concreto que figura en pantalla en el que se indica a cuántas hay que eliminar. Un proceso obligatorio mientras vas observando cómo vuelan las tripas y la pantalla se tiñe de color rojo por los litros y litros de sangre que saldrán disparados por todas partes.
Hay que reconocer que el rendimiento es muy bueno, a pesar de la gran cantidad de bichos que aparecen simultáneamente, y la ambientación es excelente para meterte más de lleno en la tensión que desprenden estos enfrentamientos. Esto mismo se logra con los propios Zeds, ya que no son unos simples monigotes. Cada una de estas criaturas cuenta con aspectos aterradores y también se dividen en diferentes tipos, lo que recuerda inevitablemente a otros FPS cooperativos como Left 4 Dead 2 y Back 4 Blood.
Entre todos estos enemigos especiales, hay algunos que te echan una pota asquerosísima, otros que se rajan las cuerdas vocales con unos gritos atronadores y también están los que no te dejan marcharte de rositas al atraparte con un gancho. Así a lo largo de unas cuantas oleadas en las que la dificultad no para de ir en aumento, ya sea porque se incrementa la cantidad de monstruos, por su comportamiento tan despiadado y porque cada vez surgen más que requieren que te esfuerces al máximo para hacerlos picadillo. Todo ello hasta llegar a la última, que supone un combate contra un poderosísimo jefe final.
En medio de esta caótica experiencia tan visceral, también hay momentos de calma para respirar tranquilamente cuando has superado con éxito una oleada, porque en ese instante puedes localizar unos puntos que ejercen de tiendas en las que puedes recargar la munición y obtener otros artículos para salir adelante. Cuanto mejor lo hagas, más dinero te acabará sobrando, aunque eso no quita que el juego tenga un toque de survival horror en el sentido de que la munición no sobra y el dinero no abunda.
Esto mismo lo aprecié sobre todo al jugar en solitario. En ese caso no tenía ayuda de ningún tipo y lo pasé realmente mal. En cambio, el cuento cambió por completo cuando más gente se unió a la fiesta, dado que en ese caso los enemigos caían más rápido y fue más fácil en general. Sobre todo porque si estás mal de dinero, te pueden echar un cable tus compañeros al cederte toda la pasta que necesites. Sin embargo, no es oro todo lo que reluce.
En Vida Extra
El sistema antipiratería de este juego de las Tortugas Ninja era tan perverso que lo convertía en un infierno imposible de superar
El único escenario disponible en la beta contaba con unas dimensiones descomunales, con mil sitios para visitar, pero es algo tremendamente absurdo que no sirve de nada. Cuando jugué con otra persona y vi que tenía más nivel que yo (ganas experiencia con cada partida para desbloquear mejoras), decidí seguir todas sus indicaciones. Así fuimos a parar a un lugar desde el que podíamos saber perfectamente por dónde nos iban a atacar y estar prevenidos con tan solo permanecer quietos en un único lugar.
Por lo tanto, ¿de qué me sirve que me pongas un escenario inmenso si no me motivas a desplazarme por él? Porque sí, hay misiones secundarias, como una de localizar unos cadáveres para recuperar datos, pero no pasa absolutamente nada si la ignoras y te centras en lo realmente relevante: la matanza pura y dura. Por su parte, la jugabilidad en general me ha parecido entretenida, aunque no he notado algún cambio destacado con respecto al anterior título.
Al final, por muy bien que me lo haya pasado pegando tiros, he sentido que es otro FPS más. No ha supuesto ninguna revolución de lo que ya vimos en Killing Floor 2 porque lo que me ha transmitido es que es más de lo mismo. No obstante, también he de reconocer que esto ha sido una simple beta y que su versión final incluirá más escenarios, enemigos, armas, modificadores y mucho más. Aun así, lo visto hasta ahora no me ha generado el suficiente entusiasmo para que espere con ganas su tercera parte.
Otro factor a tener en cuenta es que me ha costado lo suyo encontrar gente en las partidas en un juego en el que precisamente la experiencia cambia radicalmente dependiendo de si juegas solo o con otras personas. De hecho, los mejores recuerdos que guardo de Killing Floor 2 son de las partidas que libré en su multijugador online, así que mantengo la esperanza de que eso mismo vuelva a suceder con la versión final de Killing Floor 3, pero por ahora queda demasiado trabajo por delante para colarlo en mi lista de los lanzamientos más esperados.
Fecha de lanzamiento de Killing Floor 3
La llegada de Killing Floor 3 está prácticamente a la vuelta de la esquina. Está previsto que salga a la venta el próximo 25 de marzo para PS5, Xbox Series X/S y PC a través de Steam y Epic Games Store.
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La noticia Killing Floor 3 es una constante lluvia de vísceras, pero le queda demasiado trabajo para que quiera darme un baño de sangre fue publicada originalmente en Vida Extra por Sergio Cejas (Beld) .
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