Repasamos algunas de las ventajas de los electrodomésticos inteligentes: eficiencia, seguridad, accesibilidad...
Más de una vez hemos hablado en Hipertextual cómo la innovación que se da en electrodomésticos no suele ser noticia, e incluso a veces se desprecia. Tendemos a pensar que añadir funciones inteligentes a electrodomésticos que llevan años entre nosotros no es relevante, que una lavadora siempre será una lavadora y un frigorífico siempre será un frigorífico. Y en parte es cierto, alguna vez el proceso de mejora puede ser artificial, como en aquellos smartphones de hace muchos años cargados de funciones inútiles. Pero las ventajas de los electrodomésticos inteligentes son muy variadas y merece la pena explicarlas.
Eficiencia
La eficiencia es una de las grandes ventajas de los electrodomésticos inteligentes. Si ya en los electrodomésticos normales se dio hace unos años un proceso que llevó a la renovación con el pretexto del consumo, la gama blanca inteligente potencia todo eso. Algunos electrodomésticos monitorizan la energía que consumen y son capaces de mostrar los datos en el smartphone, así como de notificar que la puerta de un electrodoméstico se ha quedado abierta, o que se encuentra encendido y no es standby como debería.
De igual manera, otros son capaces de informar sobre las horas a las que es mejor utilizarlos, dependiendo de los tramos horarios eléctricos en que nos encontremos. En el caso de ser una hora de precio más elevado, pueden ponerse en modo ahorro de energía. Todo en conjunto hace además que se ahorre agua o gas natural, con lo que unido al consumo se energía, se favorece al medio ambiente.
Monitorización remota
Otra gran ventaja sobre la gama normal es la posibilidad de controlar nuestros electrodomésticos a distancia, desde el ordenador y mayoritariamente desde el smartphone. Por ejemplo, se da la situación de que salimos de casa y hemos olvidado encender el lavavajillas o la lavadora cuando ya tenía la ropa cargada. Con ellos abrimos la aplicación y encendemos desde cualquier punto con internet. Tan sencillo como eso. Cuando han acabado, nos notifican, y así no olvidamos que hay que tender la colada o colocar los platos del lavavajillas.
Seguridad
La gama blanca inteligente puede detectar fugas de agua o daños u obstrucciones en conductos internos, por lo que la mejora en seguridad es importante. No es raro dentro que no es lo más común el caso de que nos vamos de casa con un electrodoméstico en marcha y al volver la cocina o el lavadero está inundado porque se ha roto una cañería. Una de las ventajas de los electrodomésticos inteligentes es que al detectarlo, se para y notifica. Así podremos saber si hay un problema grave en casa.
Accesibilidad
Una casa conectada permite el control por voz y la interacción con sonidos con las personas invidentes que necesitan otro tipo de guía además del físico (botones, ruedas, etc). La gama blanca inteligente permite ser activada por voz en algunos casos, favoreciendo los casos donde la accesibilidad aporta mucho.
Funciones de smartphone
Con ciertos electrodomésticos como los frigoríficos, es posible acceder a aplicaciones como Google Calendar, útil para sustituir el clásico horario escrito a mano donde vemos en qué anda cada miembro de la familia, o el navegador web, para hacer alguna consulta esporádica. También funcionan como monitor del inventario y como marco digital para fotos familiar.
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