NASA firma un acuerdo con las empresas privadas SpaceX y Boeing para que sean estas las encargadas de llevar a sus astronautas al espacio.
Desde que se cancelara el programa de transbordadores de la NASA hace algunos años, los astronautas de la agencia espacial de los Estados Unidos han sido llevados a la Estación Espacial Internacional a través de las naves espaciales Soyuz, de Rusia. Cada viaje de estos tiene un precio para la NASA de 70 millones de dólares, pero más allá del elevado costo de "transporte" al espacio, lo más relevante es la dependencia de la NASA en Rusia para poder ir a la Estación Espacial.
Esto está a punto de finalizar, y es que la NASA acaba de anunciar que ha firmado un contrato por 6.800 millones de dólares, con las compañías SpaceX y Boeing para que sean estas compañías las que le presten el servicio de traslado a la Estación Espacial Internacional a sus astronautas. En pocas palabras, ahora SpaceX y Boeing pasarán a ser el medio oficial de transporte de la NASA al espacio, al menos por un tiempo.
Así, finalizará la dependencia de la agencia norteamericana en Rusia (algo que seguro no los tenía muy felices), y además, supone un gran impulso para la exploración espacial desde el punto de vista de compañías privadas, siendo integradas directamente en los programas de la NASA, al ser su medio de transporte.
Bien sabemos que compañías como SpaceX, fundada por Elon Musk (PayPal), además de Virgin Galactic, tienen una gran ambición en cuanto a la exploración espacial, y quieren en un futuro no muy lejanos "llevarnos de vacaciones al espacio", según palabras de Sir Richard Branson (Virgin). Para esto aún falta mucho tiempo y la tecnología debe evolucionar más en cuanto a la exploración y, por qué no, colonización espacial.
Pero el caso es que el interés de la empresa privada en los programas espaciales existe, y ahora la compañía del visionario Musk y la compañía experta en aeronáutica, Boeing, son bienvenidos directamente por la NASA como servicios de transporte espacial.
Tanto SpaceX como Boeing deberán realizar un vuelo de prueba a la Estación Espacial Internacional en el año 2017. De ser un éxito, comenzarán a transportar a los astronautas desde ese mismo año.
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