El espíritu del iPod nunca se ha ido del todo. Para muchos fue su primer producto de Apple, y hoy sigue habiendo quien los reacondiciona con más capacidad, baterías nuevas, almacenamiento flash e incluso Bluetooth para adaptarlos a cómo escuchamos música ahora. Se mantiene vivo ese deseo de tener un dispositivo independiente, pensado solo para disfrutar de canciones sin depender del iPhone.
En paralelo, han surgido proyectos que buscan traer de vuelta esa sensación utilizando el Apple Watch como base. TinyPod es uno de los ejemplos más conocidos: una carcasa que envuelve el reloj y lo transforma en algo muy parecido a un iPod, usando la corona digital como si fuera la clásica rueda de control. Ahora aparece otra alternativa que sigue la misma idea, pero desde un ángulo distinto: RePod C1.
El iPod escondido en el Apple Watch
El RePod C1 apuesta por una carcasa de aleación de aluminio mecanizada mediante CNC. Es decir, se ha tallado un bloque de metal sólido por ordenador para lograr una precisión milimétrica, en lugar de usar un simple molde. No se trata de una funda de plástico, sino de un cuerpo rígido que le da esa sensación de objeto dedicado a la música que algunos echamos de menos.
La gracia es que no renuncia a lo que hace especial al Apple Watch. El diseño deja acceso directo a la corona digital y al botón lateral, de forma que se pueden seguir usando con normalidad, y respeta la zona de sensores para que todo funcione como siempre.
Además, mantiene intactas funciones como Apple Pay y el resto de capacidades nativas del reloj, algo clave si queremos usarlo como un pequeño reloj de bolsillo. Otro punto donde RePod C1 va un paso más allá está en la carga. Integra un conector magnético de carga rápida que permite colocar el conjunto sobre la base sin tener que sacar el Apple Watch de la carcasa. Con un solo gesto empieza la carga y se evita desmontar el accesorio cada vez que la batería se agota.
El gran pero: la compatibilidad
Sobre el papel, RePod C1 es compatible con Apple Watch Series 4, 5, 6, 7, 8 y 9, además de los modelos SE de primera, segunda y tercera generación en tamaños de 44 y 45 mm. Esto incluye el último SE, que mantiene el diseño de generaciones anteriores.
El problema es que no es compatible con los modelos más recientes, como el Apple Watch Series 10, Series 11 ni con ningún Apple Watch Ultra. Quien ya haya dado el salto a estos relojes (como yo) se queda fuera, salvo que conserve un modelo anterior en buen estado o se compre un Apple Watch SE solo para esta ocasión. No hace falta uno nuevo. Quizás uno de segunda mano por unos cien euros o menos sea una opción interesante.
Un capricho curioso para regalar
El precio del RePod C1 ronda los 43 euros más gastos de envío, muy por debajo de otros proyectos similares como TinyPod. Esto lo convierte en un capricho interesante para regalar. No es un accesorio "de impulso", sobre todo por esa incompatibilidad con el Series 10 y 11, pero tampoco entra en territorio de lujo si tenemos en cuenta los materiales y lo específico de la propuesta.
La marca ofrece envío internacional con plazos estimados entre 3 y 10 días y una política de devolución de 30 días, siempre que el producto se devuelva con todos sus accesorios y embalaje original. Para quienes tengan un Apple Watch compatible guardado en un cajón, puede ser la excusa perfecta para darle una segunda vida. Y para quienes ya tenemos un Series 10, 11 o un Ultra, solo queda cruzar los dedos y esperar a que llegue una versión pensada para esos modelos.
Fuente | RePod C1 y kktechh
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La noticia Unos diseñadores han decidido que el Apple Watch vuelva a parecerse a un iPod. El resultado es esta carcasa que me ha enamorado fue publicada originalmente en Applesfera por Guille Lomener .
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